A pesar que la ministra de Cultura Leslie Urteaga, se encuentra en el ojo de la tormenta, no solamente por ejercer una de las peores gestiones en 13 años, desde la existencia de esta cartera, y por desatender su verdadero rol de proteger y cautelar el patrimonio cultural, sino, por su obstinada pretensión de imponer un lobby de privatización de boletos a favor de Joinnus, y que según sus propias palabras: “de todas maneras, saldrá la próxima semana, a inicios de 2024”; ella sigue mostrando un absolutismo feroz por el “poder”, que desde su perspectiva, le confiere la mandataria Dina Boluarte y una vez más, muestra su despótica conducta.
Ayer, miércoles 20 de diciembre, la arqueóloga Maritza Candia denunció que la cartera de Cultura ejerce una “gestión centralista”, que de todas maneras quiere imponer un nuevo sistema de venta de boletos electrónicos para Machupicchu, e inmediatamente renunció al cargo de directora de la Dirección Desconcentrada de Cultura de Cusco (DDC de Cusco).
Exdirectora de la DDC de Cusco, Maritza Candia.
Sin embargo, antes que Candia renuncie a su cargo en Cusco, la ministra Urteaga le envió el memorando N° 000043-2023-DM/MC, —con un tono tirano — ordenándole —, en su calidad de superior jerárquico y por ser la más alta autoridad ejecutiva del Ministerio de Cultura — que inmediatamente deje de vender más boletos correspondientes al año 2024 a través de su habitual plataforma de https://www.machupicchu.gob.pe/.
Memorando N° 000043-2023-DM/MC enviado por ministra Leslie Urteaga.
La ministra Urteaga, ordenó a Maritza Candia esa “consigna”, porque en el mismo documento, recalcó que ya se encuentra en curso el inicio de la implementación de la modernización de la plataforma de venta de boletos, por parte de la empresa privada Joinnus.
Asimismo, le pidió que en el plazo de tres días hábiles remita a su despacho un informe detallado con la liquidación completa al 20 de diciembre, de las ventas y reservas de boletos, así como los saldos pendientes por cobrar; no obstante, Candia ya no labora en la DDC.
No cabe duda que la ministra de Cultura Leslie Urteaga, en plenas fiestas navideñas, a pesar, que tiene en contra a los propios ciudadanos de Machu Picchu y pese a las acciones de amparo y medidas cautelares interpuestas en su contra, ella solo vive y respira para que en pocos días se active la venta electrónica de boletos para la llacta y el Camino Inca, gestionados por Joinnus.
Sus propias palabras la delatan
“No se va a suspender los boletos a través de la plataforma de forma virtual. Pues, no es que haya una suspensión, quizás es un retraso de unos días, pero nos mantenemos firmes en que la plataforma va a salir para el 2024, incluyendo Machupicchu.
Tenemos que tener en cuenta que el Mincul es el ente rector sobre la protección y la conservación de los monumentos, del patrimonio arqueológico y aquí la disposición que tiene el ministerio es de mejorar el servicio.
Ayer emitimos un comunicado donde indicamos que vamos a tener un breve periodo de tiempo de darle a los usuarios toda la información; de tal manera que esperemos que hasta la próxima semana podamos tener ya la salida de la venta. Y solo se va a postergar”.
Mientras tanto, en Cusco continúan realizando masivas marchas pidiendo la renuncia inmediata de la ministra Leslie Urteaga y exigen que de una vez intervenga la Fiscalía Anticorrupción.