Jesús Solari sacude IRTP con despidos para congraciarse con gobierno de Dina Boluarte
El Presidente del IRTP Jesús Solari echó a Carlos Cornejo de TV Perú por un editorial interpretado en contra del gobierno y de la Policía Nacional del Perú y además sacó al gerente de Prensa, Carlos Becerra por aumentar el salario a 20 trabajadores que ganaban sueldos bajísimos.
Un nuevo escándalo sacude los cimientos del Instituto de Radio y Televisión del Perú (IRTP) al confirmarse el despido de dos periodistas de forma repentina por órdenes directas del cuestionado presidente ejecutivo, Jesús Solari Díaz, y de su adlátere Marta Aguirre, quien prácticamente sería la que gobierna y decide en la institución del Estado.
Se trata de Carlos Cornejo, conductor del programa nocturno Rimanchik, por la señal abierta del canal estatal y de Carlos Becerra, quien deja la gerencia de Prensa.
Recordemos que Cornejo en otros tiempos fue protagonista en las pantallas de Canal N. Mientras que Becerra fue presidente ejecutivo de Editora Perú, El Peruano y de la agencia de noticias estatal Andina.
Cornejo habría sido echado por opinar sobre la realidad nacional. Precisamente hace dos días, antes de entrevistar a José Manuel Villalobos, especialista en derecho electoral y a Flavio Ausejo, especialista en políticas públicas. “El Gordo”, como lo llaman sus amigos, editorializa al abrir el programa en la pantalla de la televisión pública sobre la muerte del ciudadano Víctor Raúl Santisteban.
Cornejo mencionó: “Tenemos una mala noticia. El asesinato de un ciudadano a manos de la policía. Víctor Raúl Santisteban, y lo vimos todos en las imágenes de seguridad del municipio limeño, muere por el impacto de un proyectil que le lanza un policía. Querrán decirnos que fue una piedra, querrán decirnos que no fueron ellos. Querrán decir cualquier cosa. Las imágenes no mienten. Todos vimos que quien mató a Víctor Santisteban, en una manifestación donde él no estaba haciendo nada, fue la policía. Y eso el Estado de Derecho no lo puede permitir”.
Qué bueno hubiera sido, que: así como se tomaba esta libertad para opinar, Cornejo hubiera sido justo en el contenido de su programa televisivo durante su permanencia y lo habría manejado de modo plural e imparcial; pero no fue así, porque muy pocas veces invitó a la clase política opositora al gobierno y al caviarismo. Un punto en contra de Cornejo y que lo convirtió en otro periodista militante, y precisamente en una entrevista de hoy ha declarado que “le sorprendería” que en TV Perú lo hayan despedido por sus declaraciones y que “no cree que esa haya sido la razón” ¿No que era un periodista incisivo, valiente y decidido? ¿por qué se va por la “tangente” si tiene la oportunidad de declarar lo que piensa de las razones de su salida del IRTP? Sin duda, este “Dager Boy” como buen comunicador de la zurdería también está guardando “pan para mayo”, basándose en sus propias aseveraciones: “Así que de momento me enviaron a casa y en marzo sabremos si nos volveremos a encontrar”.
Un tema parecido es el que vivió el canal de todos los peruanos cuando emitía en el mismo horario Cara a Cara con la conducción del “desaparecido” Enrique Chávez. En este programa se ensalzó al Lagarto Martín Vizcarra y a sus esbirros, como también al encargado de Palacio Francisco Sagasti y a todos los congresistas del Partido Morado. Chávez ejerció cero pluralismo e imparcialidad y cero enfoques de televisión pública. Lamentablemente Cara a Cara fue un programa que “adoctrinaba”, difundiendo los equivocados teoremas del caviarismo más puro.
Esta decisión de despedir a Cornejo sopesa en el IRTP para disimular la metida de pata del domingo último cuando Jesús Solari autorizó levantar la señal en vivo del Festival de La Marinera para transmitir ininterrumpidamente las marchas violentas en las calles limeñas.
De esta manera, repitió el mismo acto de noviembre del 2020 cuando TV Perú fue protagonista de las marchas violentas en las que fallecieron Inti y Bryan, ordenado por el entonces gerente de Prensa, Renzo Mazzei Mancesidor, de ideología política caviar y que ahora trabaja en la ONPE al lado de Piero Corvetto.
En aquel tiempo, significó un rechazo abierto por un grupo de ciudadanos que se lanzaron a las redes sociales para criticar la transmisión de enfrentamientos abiertos de vándalos y policías. Uno de los más retuiteados fue Beto Ortiz quien denunció esta decisión de Jesús Solari porque aseguró el periodista: que las cámaras de TV azuzan a ser más violentos a ambos bandos.
Entonces, para congraciarse con sus superiores, específicamente con la ministra de Cultura, Leslie Urteaga, que es su jefa directa y quien lo puso en el cargo pese a las sospechas de sus estudios de maestría online, decide despedir al periodista Carlos Cornejo por usar la pantalla pública para opinar contra la policía y el gobierno de Dina Boluarte. Sin embargo, Solari también pretende despistar a sus críticos y al despedir a Cornejo da a entender que el IRTP ya no es tomado por los caviares, pero ya se viene la campaña electoral y se necesita el canal para que los resucitados Morados hagan su campañón a nivel nacional.
De otro lado, se suma el despido del gerente de Prensa, Carlos Becerra, a quien junto a los superiores de turno pidió poner a disposición los cargos y aprovechando esta figura emite la resolución del cese de funciones en el IRTP.
Por lo visto, a Solari se le cayó toda la estantería, porque la gerencia de prensa en estos momentos está acéfala y al parecer Carlos Fonseca tampoco habría aceptado venir a una de las gerencias debido a los destapes periodísticos y al despido intempestivo de los 2 periodistas. A ello se suma que en la misma área de Prensa ninguno de los periodistas antiguos quiere asumir la encargatura de dicha gerencia.
Pero el trasfondo de este despido sería la injerencia de la jefa de Recursos Humanos, Marta Aguirre, quien de facto sería la líder de la “organización” llamada los “Dager Boys” (servidores públicos que llevó al IRTP Joseph Dager, ex presidente ejecutivo). Ella tuvo un mal comportamiento con Carlos Becerra luego que recibiera una observación hallada en el informe que evalúa su perfil laboral. Marta Aguirre había disminuido adrede 2 años y meses, para que ante cualquier eventualidad su CV no sea recomendado ante los superiores.
Además, según nuestras fuentes consignó a propósito estudios universitarios que Carlos Becerra nunca declaró. Y al recibir la queja, de modo desafiante le respondió muy soez pese a que jerárquicamente Becerra era superior. El reclamo fue justo porque había alterado el contenido real de la experiencia general y la experiencia específica que urge en el cuadro de Clasificador de Cargos del IRTP.
Ella no habría dudado en inferir en la decisión de Jesús Solari Díaz para despedirlo, sobre todo porque Carlos Becerra, dentro de sus facultades en la gerencia de Prensa, otorgó para este mes de febrero aumentos de sueldos a 20 trabajadores del rubro Temporales que ganaban una miseria hace años y que ninguna autoridad, antes, se empeñó en hacer justicia.
Todo esto demuestra que el IRTP merece la atención del Poder Ejecutivo.
Tenemos información de anomalías y tropelías que estamos investigando; como la presunta contratación de un abogado en la sombra en el despacho de Marta Aguirre. Desde su casa le escribiría las resoluciones y fallos de procesos administrativos de trabajadores que son investigados por malas prácticas. Como la de una ex gerenta de Televisión a la que le cambiaría el dictamen de suspensión, por amonestación por escrito, amparado en la teoría de la “razonabilidad”.
Sin duda, esto es todo un despropósito. Y en lugar de sancionar, perdonan… ese sería el modus operandi de aquel “abogado” que nadie conoce y que no está embebido del caso a fondo, porque no vivió el perjuicio que se le hiciera al propio IRTP; y encima, redactaría los escritos desde su casa… en la clandestinidad, y cobraría mediante orden de servicio S/12 mil soles.
Así estamos en el IRTP… que, al parecer, sigue siendo una chacra que pasa de gamonal a gamonal.
Seguiremos indagando y recabando información y más documentos…