Escribe: Luis Felipe Alpaca
Generalmente no lo tomamos en cuenta,
pero si nos ponemos un poco acuciosos cada vez que realizamos una transacción
financiera en la agencia del Banco que nos toca en aquel momento y si observamos
en la parte inferior del voucher impreso que obtenemos luego de la operación,
podemos leer unas pequeñas siglas que corresponden a un concepto. Dicho
concepto se denomina ITF.
¿A qué se denomina ITF? ITF se denomina al Impuesto a las
Transacciones Financieras y precisamente fue creado en el año 2004, inicialmente
mediante el Decreto Legislativo 939, y su mentor fue nada menos que Pedro Pablo
Kuczynski desde que asumió la cartera del ministerio de Economía y Finanzas
durante el quinquenio de Alejandro Toledo.
Según el
argumento de PPK que en aquella época gozaba de un prestigio como tecnócrata y
que ni se imaginaba que despues sería presidente del Perú, dicho impuesto
permitió la bancarización de las operaciones económicas y comerciales que realizaban
las personas y las empresas mediante las organizaciones del sistema financiero,
que utilizaban los medios de pago que la ley permite.
Otro de los
argumentos del hoy arrestado-domiciliario fue la otrora lucha contra la evasión de
impuestos para así poder formalizar la economía peruana que dizque se
encontraba menoscabada, con un tesoro público saqueado por el anterior gobierno
del fujimorato.
Aquel controvertido
impuesto grava solamente determinadas transacciones financieras siempre sobre
el monto total de la operación, como por ejemplo el cobro de los cheques de
gerencia, los retiros o depósitos de una cuenta del sistema financiero, las trasferencias
de fondos y los giros bancarios. Y ante los reclamos en aquella época de los
gremios tanto empresariales como sindicales la ley accedió a exonerar los depósitos
y pagos a remuneraciones salariales, CTS y pensiones, así como a transferencias
de pagos por servicios básicos. Por tanto, la tasa impositiva al principio y de
forma inquisidora era de 0.10% del total de la operación, pero con el paso del
tiempo, más allá de eliminarla, simplemente se redujo a 0.005%.
El hecho es que
aquella medida radical de recaudación no fue nada creativa de parte de PPK,
porque pudo evaluarse otras opciones técnicas que se mostraran de forma
paulatina para no asfixiar económicamente a los peruanos, sin embargo, no se
escuchó el clamor popular, e incluso aquel desprestigiado ex presidente,
también durante su mandato en el MEF y a pesar que prometió bajar el IGV a 16%,
faltó a su palabra y lo elevó a 19% ¿Dónde estaba el tecnócrata de lujo que de
manera rauda tomaba medidas anti-técnicas y extremas? No por algo hoy se
encuentra ad portas de pagar sus cuentas con la justicia.
Lo más
desagradable es que PPK durante el mandato Toledista engatusó a la ciudadanía y
en medio de un debate político con todos los agentes sociales y económicos
defendió a capa y espada su propuesta urgente de recaudación y arguyó que el ITF solo sería temporal. En principio se
habló que sería solo por un trimestre, luego por tres y así por cuatro…
El hecho es que
ya han transcurrido 16 años desde su creación y el ITF sigue siendo el producto estrella de las empresas del sistema
financiero, llámese los Bancos (y por más que esté en el plano anecdótico, no
olvidar el uso de los fondos de entidades financieras como el BCP que de manera
subalterna a través de su CEO otorgó dinero de los usuarios y por millones para
una campaña presidencial) y también del Estado, es por ello que el MEF y la
SUNAT defienden su “caballito de batalla” el ITF, porque aducen que es una forma eficaz de detectar
transacciones sospechosas y/o de lavado de activos.
Han pasado más
de tres quinquenios de gobiernos corruptos e incompetentes y en cuyo saldo
tenemos a tres exmandatarios procesados y a punto de terminar en la cárcel y
hasta el momento nadie se ha dignado de derogar la ley del ITF y hasta la fecha y en medio de una investigación fiscal a la
exjefa de Sunat la prima de Nadine Heredia: Tania Quispe, se calcula que ha
recaudado al Estado peruano alrededor de 18,208 millones de soles.
La pregunta es ¿Han
hecho caja para quién? La respuesta… luego de conocerse todos los destapes de
los Petroaudios, de la Interoceánica, el Gasoducto del sur, los contratos con Odebrecht
y el Club de la construcción… la tenemos todos los peruanos.