Perú es como un cuadro de pintura a medio hacer, de la mitad para abajo el equipo se pone el overol y la pelea en cada pelota dividida, pero de la otra parte de la cancha solo se ven muchas áreas en blanco, bosquejos, pinceladas de lo que pueden ofrecer los dirigidos por el ‘Nono’ Jorge Fossati.
Queda más que evidente que la idea principal del profesor Fossati es procurar el marcador en cero en nuestra valla. Si no se puede ganar ante rivales superiores como casi todos los equipos de Sudamérica, al menos lo que intenta el ‘Nono’ es no salir goleados de los encuentros, y eso se reconoce. Cuesta mucho salir de un esquema táctico que dejó el ‘Tigre’ Ricardo Gareca para pasar a la alineación preferida del estratega uruguayo; su 3-5-2 es parte del ADN del entrenador de 71 años y eso le está costando muchísimo al jugador peruano.
Ver a Oliver Sonne jugar de interior o a Alexander Callens, que su posición natural es de defensa central, de lateral izquierdo genera bastante incomodidad. O a Andy Polo, que su mayor potencial es el uno contra uno en el área contraria, verlo como un defensa más, sinceramente me tocó de nervios anoche. Pero poco a poco fui cayendo en cuenta que Fossati va a sacrificar las posiciones originales de los jugadores para preservar su esquema favorito.
Ese desconcierto, como era previsible, no produjo nada positivo en la parte de adelante. Álex Valera y el ‘Oreja’ Edison Flores eran neutralizados por los defensas ‘charrúas’ cuando les tocaba controlar un balonazo de Jesús Castillo o Sergio Peña. Perú estaba perdido en la mitad del campo, desconectado, confundido por las nuevas posiciones que tenían que adoptar los jugadores del ‘Nono’. Ver a Callens querer sobrepasar por el lado izquierda a los rivales me dejaba una gran interrogante que no podía disimular con cada resoplo de molestia. El ‘Vikingo’ Sonne era improductivo en el círculo central, desorbitado, más perdido que huevo en ceviche.
Cuando se dio el gol de Miguel Araujo al minuto 88 ni me inmuté por ello, cabezazo contra el arco de Rochet, por arriba, al mismo estilo uruguayo. Perú estaba jugando tan mal que el gol del defensa peruano resultó un error en la Matrix, una falla en el desarrollo del encuentro. Nos estábamos quedando con tres puntos jugando horrible, sin ideas, carentes de propuestas ofensivas. La defensa uruguaya también tuvo anoche uno de sus peores desempeños en las Eliminatorias. Ver a jugadores renombrados como Guillermo Varela o Santiago Bueno perder pelotas de manera tan inocente, hasta amateur diría, me hacían pensar si realmente valían tantos millones en el mercado futbolero.
Perú ganó, pero seguimos al fondo, solo por encima de Chile del ‘Tigre’ Gareca que ya olfatea que sus dirigidos le vienen haciendo una tremenda camita King zise. Precisamente nos tocará medirnos contra ellos en noviembre y tal vez signifique el final de nuestro ex entrenador en su periplo por el país sureño. Antes de ello, nos tocará medirnos contra Brasil de visita el próximo martes.
Victoria pírrica de la Selección por lo visto anoche. Ganamos tres puntos con muy poco y eso me deja un sabor agridulce.