Política
Fujimorismo le da la espalda a Dina Boluarte y ocasiona una crisis ministerial
A pesar de la remoción de tres ministros, partido de Keiko Fujimori adelantó que iba a votar a favor de la censura de Adrianzén.
Le arruinaron sus planes. El partido de Fuerza Popular cuenta con 21 congresistas actualmente, representando el 16.15 % del total de 130 parlamentarios. En un principio, dicha cifra no es tan sustancial al momento de tomar decisiones, sin embargo, ante un Congreso tan fragmentado, los 21 parlamentarios significan la aprobación o denegación de un tema trascendental, en este caso la moción de censura del ahora ex premier Gustavo Adrianzén.
Sumado a los 11 representantes de Renovación Popular, bancada que tras la sustitución de tres ministros de Estado no vio de manera positiva dicho cambio, el total de votos en contra subía 32, casi el 25 % del total de legisladores, representando un duro revés para la permanencia de Adrianzén en la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM).
Ante ello, la jefa de Estado, Dina Boluarte, consideró aceptar la renuncia de su entonces premier, adelantándose a una más que probable censura de Adrianzén, lo que a la larga la pondría en una delgada cuerda si es que el Congreso decide censurar nuevamente a un premier de Boluarte, conllevando a una disolución del Parlamento, de acuerdo al artículo 134 de la Constitución Política, sin embargo, líneas más abajo del citado artículo también se lee que el Poder Legislativo no podrá ser disuelto a falta de un año para que culmine el mandato de Dina Boluarte.
Es así que la jefa de Estado en estos momentos se encuentra en una gran encrucijada debido a que en estos momentos el Congreso tiene ‘la sartén por el mango’, sobre todo si Fuerza Popular decide exprimir más el ‘pacto tácito’ que tiene con Boluarte, exigiéndole una mayor cuota de poder en ministerios o tal vez pidiendo que uno de sus hombres de confianza de Keiko Fujimori asuma el premierato. De darse ese hipotético caso, la chalhuanquina permanecería como un títere el año que le resta, dejando la ‘cancha servida’ para que la hija de Alberto Fujimori se enrumbe a una posible candidatura presidencial.
Definitivamente la jugada le ha salido muy mal a Dina Boluarte, tanto es así que sus maletas para viajar al Vaticano se van a quedar abandonadas por un buen tiempo. Sería demasiado irresponsable de su parte que viaje para ver al papa en medio de una severa crisis ministerial, pero ya se ha visto que cuando se trata de caprichos la presidenta hace oídos sordos a las críticas.