Misterios sin resolver o ocultamiento de información que estaría dando tiempo a algunos funcionarios que se habrían beneficiado de vacuna china de Sinopharm. No creemos que un Gobierno, que se dice ser exigente y estar acorde en lineamientos científicos a nivel mundial, caiga de ingenuo; ni la ciudadanía se cree esas explicaciones que día a día rayan con lo absurdo.
Bermúdez argumentó que existe un número de vacunas que no aparece porque en la lista entregada por la Universidad Cayetano Heredia figuran solo 487 personas y sin embargo se sabe que había dosis hasta para 1,000 personas.
La primera ministra aceptó que resulta una sorpresa observar que hubo personas a las que se aplicaron tres dosis.
“No sabemos cuál es el destino, formalmente no sabemos dónde están esas dosis que faltan, sin embargo, la comisión investigadora (del Ejecutivo) también va a solicitar esa información y estoy segura de que las autoridades competentes a quienes hemos pedido que actúen, es decir el Ministerio Público y Procuraduría, actuarán de acuerdo a ley”, manifestó.
Bermúdez remarcó que del total de personas vacunadas que eran funcionarios públicos ya ninguno forma parte del Gobierno. Agregó que, de los 16 servidores de la actual administración que participaron en este proceso de vacunación oculto, ocho pertenecían al Ministerio de Salud (Minsa) y otros ocho al Ministerio de Relaciones Exteriores (MRE).
Por otro lado, la premier Bermúdez calificó como falsa la información difundida en las redes sociales acerca de que el presidente Francisco Sagasti ya se habría vacunado. “Este 9 de febrero se puso la primera dosis del primer lote adquirido a Sinopharm”, señaló.
Bermúdez pidió a la ciudadanía en general no inventar historias, ni manchar honras. Dijo que a pesar de los recientes hechos relacionados con funcionarios que se aprovecharon de sus cargos, existe un número mayor de funcionarios correctos en el aparato estatal.
