CRÍTICA

CRÓNICAS CHILANGAS: Porque se vive mejor riendo!

Edwin Cavello

Crónicas Chilangas recorre historias con experiencias sexuales, trágicas y enfermizas producto del consumo. Carlos Enderle se divierte con sus personajes obsesionados, entre el sexo, el dinero y los extraterrestres.  Filme mexicano que inserta situaciones comunes, apuesta por la simpleza, se aleja de lo épico ya que aquí lo que importa son las relaciones humanas. La necesidad es un protagonista  metafísico  que conduce la historia por la tragicomedia.

Enderle sabe que hacer cine no es fácil,  y aprovecha todo tipo de recursos para construir la historia. Una mujer que esta fuera del estereotipo de la “belleza femenina” descubre  placer por las revistas pornográficas, se libera de tabús encontrando una libertad que le permite vivir tranquila y feliz con ella misma. Un anciano que su mayor problema es la falta de dinero, a esto se suma las deudas, la responsabilidad de ser padre y cuidar a su hija cuadrapléjica. Con mirada sensible recorre la miseria humana sin caer en lo lacrimógeno, muestra situaciones universales que se entienden bien, gracias al lenguaje narrativo.

Creando un personaje esquizofrénico condimenta la historia con humor simple sin esfuerzos, Jairo es un joven que cree en extraterrestres, que es el elegido en salvar al mundo, aquí Enderle se burla de la película de los hombres de negro, de ese cine enlatado hollywoodense.
El secuestro es la excusa perfecta que une la historia, interconectando a los personajes en una sociedad mexicana que sirve como escenario adecuado para contar anécdotas.

El manejo de cámara es algo que resalta en la película, las tomas de picado y contrapicado permiten respirar de cerca las diversas situaciones que se mueven con buen ritmo, la música aparece acertadamente en las escenas, manteniendo al público conectado. Como dice Carlos Enderle esta es una película hecha para el público no para los críticos.

Una ópera prima trabajada con poco dinero, pero con cariño, con  ganas de contar historias, de compartir una sonrisa. Un trabajo bastante interesante donde ante  la falta de dinero la creatividad es la mejor solución. Dirigida, producida, escrita y promocionada por Carlos Enderle.