No hay nadie quien los pare. Nuestra selva peruana, pulmón del planeta, poco a poco viene desapareciendo y a nadie le interesa. Tala ilegal, deforestación, plantaciones de coca, tráfico de terrenos y la minería ilegal son los principales males de un territorio dejado de lado durante siglos por el Gobierno Central. Al repecto, ex autoridades resaltan que la tala ilegal se habría triplicado desde el año 2019.
Según la ex fiscal que estuvo detrás de la Operación Mercurio en 2019, Karina Garay Tapia, especializada en la materia ambiental en Madre de Dios, la actividad que opera al marco de la ley se ha visto incrementada los últimos años, pese a que el operativo que dirigió debía repetirse cada año hasta 2029. Para la exfiscal, la minería ilegal se ha triplicado en Madre de Dios.
En aquella ocasión, en febrero del 2019, se dio un fuerte golpe contra la actividad criminal, considerada la más poderosa en el país. Ella contó con 300 militares y más de mil policías, en conjunto con 70 fiscales. Sin embargo, según el informe del diario La República, el 98% del terreno que fue recuperado, regresó a los actores criminales que ejercían dicho mal al medio ambiente.
“La minería propiamente ilegal, en la que participan personas que no tienen autorización, extrae minerales en zonas prohibidas, como en las áreas protegidas y en las zonas de amortiguamiento; por ejemplo, el sector conocido como La Pampa”, explicó.
Además, acotó que existen propuestas desde el Congreso que darían una especie de respaldo y formalización de la actividad, pese a que ya constituyen un delito. Puntualiz que hay mineros que están en proceso de formalización que ya no pueden ser investigados por minería ilegal. Ello ata de manos a la Fiscalía o la Policía, cuya labor inquisidora no procede, pues existe impunidad.
Policias no cuentan con los recursos necesarios para combatir a los mineros ilegales
A ello se le agrega la falta de presupuesto que la Policía ostenta para poder enfrentar este mal. Tal es el caso de que esta mala forma de extracción de minerales moviliza cerca de 4 mil millones de dólares anuales, contrario al presupuesto de la Dirección de Investigación de Medio Ambiente de la PNP, que es de 47 millones de soles.
Así lo dio a conocer el coronel jefe de Planeamiento de la Dirección de Medio Ambiente de la PNP, Miguel Barreto Rivera, al previamente mencionado medio escrito. En un video publicado por el portal de noticias Ojo Público, se deja en evidencia la afección que esta actividad ha causado en la Amazonía. Largas manchas marrones dañan el verde extenso del marco de árboles que adornaba en un pasado mejor la selva peruana.