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Ex rectores de la UNP vienen siendo investigados por la Fiscalía por presuntamente haber violado a dos estudiantes
Hechos se habrían dado entre los años 2009 y 2013. Supuestas agraviadas indicaron que habían sido amenazadas si contaban lo ocurrido a las autoridades.
En las manos equivocadas. Si la educación en el país es una de las más bajas en la región, imagínese tener que enfrentar que violadores en potencia se encuentren interpretando el rol de educadores, teniendo a merced a miles de estudiantes, muchos de ellos menores de edad.
La fiscal especializada en delitos de violencia contra la mujer de Castilla, Diana Montoro Flores, formalizó investigación preparatoria por el presunto delito de violación sexual de persona en estado de inconsciencia contra los ex rectores de la Universidad Nacional de Piura (UNP), César Reyes Peña y José Rodríguez Lichtenheldt.
De acuerdo con la disposición fiscal N°12 del 6 de febrero pasado, la indagación tiene como sustento principal las declaraciones, en calidad de prueba anticipada en cámara Gesell, de las presuntas agraviadas J.E.B.R (33) y M.E.B.R (29) del pasado 31 de enero pasado.
Los hechos habrían ocurrido entre junio del 2009 y julio del 2013, cuando César Reyes era director de la Escuela de la UNP y José Rodríguez era rector. La Fiscalía también formalizó investigación contra Roberto Mendoza Cadillo, en calidad de presunto cómplice primario.
En declaración ante la fiscal, la presunta agraviada J.E.B.R (33) narra que los hechos del presunto abuso sexual ocurrieron 10 años atrás.
Sostiene que fue abordada por Roberto Mendoza, a quien conocía cuando estudiaba en la escuela de la UNP, para contactarla con dos personas influyentes de la casa de estudios, quienes la podían ayudar a conseguir trabajo.
“Siendo que esta persona la recoge cerca de su casa en su auto como al mediodía, le invita un vaso de gaseosa, luego ella se empieza a sentir mal y no recuerda que más pasó hasta que se despertó como a las 3:00 p.m. en una habitación de hotel desnuda y con dos personas de sexo masculino en ropa interior, a quien identificó como César Reyes y José Rodríguez”, se lee en la disposición fiscal.
La presunta agraviada J.E.B.R relata que fue amenazada con que matarían a su familia si contaba lo que había sucedido.
Según la misma disposición fiscal, la agraviada narra que una semana después de lo sucedido, su hermana de iniciales M.E.B.R se acerca y le cuenta que ella también habría sufrido de abuso sexual por parte de las mismas personas cuando tenía 16 años y cursaba el tercer grado de secundaria.
Frente a esta revelación, la fiscal también interrogó a la segunda denunciante y guardó su testimonio en cámara Gesell como prueba anticipada, el pasado 31 de enero.
Relata que entre los meses de junio 2009 a mayo del 2010 conoció a la persona de Roberto Mendoza a través de una amiga suya.
Días después, en una segunda ocasión en que la recogió del colegio, agrega, este le dijo que la podía contactar con personas influyentes de la UNP que querían ayudarla. En el trayecto a la reunión con dichas personas, sostiene, se le invitó un jugo.
En el trayecto, según la declaración ante Fiscalía, se habrían subido los dos investigados con quienes llegaron hasta un hotel bajo la excusa de encontrar un lugar privado para conversar al tratarse de una menor de edad, donde habría sido ultrajada.
Una de las agraviadas aseguró que dos años después de los hechos, Roberto Mendoza la habría contactado para ofrecerle dinero para no contar lo sucedido y reunirse otra vez. Junto con una amiga planearon grabar el encuentro para tener una prueba, logrando filmar a uno de los investigados.