Se movía donde Pedro Castillo iba. No lo dejaba solo ni por un momento, solamente cuando el ex presidente tenía que ir a descansar. Durante su labor como escolta presidencial, el suboficial natural de Chota -Cajamarca, Jorge Tarrillo Gálvez, era literalmente la ‘sombra’ de su paisano, convirtiéndose muchas veces en su confidente, en sus ojos y oídos, y según se viene descubriendo en un operario más de la red criminal encabezada por Castillo Terrones, según la hipótesis de la Fiscalía.
De acuerdo al testimonio del ex secretario presidencial Bruno Pacheco, la ‘sombra’ se desempeñaba como el operador oculto del ex mandatario, quien cumple 18 meses de prisión preventiva por haber perpetrado un golpe de Estado el pasado 7 de diciembre.
Pacheco había confesado a la Fiscalía que al menos diez oficiales de la Policía Nacional del Perú (PNP) ascendieron en sus puestos a cambio de 20 mil dólares, dinero que habría pasado por las manos de los suboficiales PNP Jorge Tarrillo Gálvez y Nilo Irigoin Chávez.
Altos mandos de la Policía implicados en sobornos
En la madrugada de ayer, un megaoperativo se desplegó por distintas partes del país, permitiendo la captura de 3 generales PNP, un mayor PNP (r) y un empresario.
Los generales son Nicasio Zapata, Manuel Rivera López y Luis Legua Egocheaga. Los dos primeros pasaron por Palacio de Gobierno antes de ser designados en zonas estratégicas de frontera como jefes de Frente Policial: Zapata en Tumbes y Rivera en Tacna. El tercero es jefe del Frente Policial Vraem.
De acuerdo a la tesis fiscal, estos oficiales pagaron US$40 mil a Javier Gallardo, entonces comandante general de la PNP, para asegurarse sus ascensos en 2021.
El dinero fue entregado a través del empresario Óscar Monge y el mayor PNP (r) Luis Tuesta, también detenidos. Según la indagación, los oficiales promovidos debían ser destacados en unidades policiales con gran manejo de presupuesto para que así Monge pudiera conseguir contratos para la venta de uniformes.
En este extremo, la Fiscalía identificó a la empresaria Patricia Sovero Niño como otra de las interesadas en direccionar contratos a su favor.
El dato:
El Ministerio Público tiene en sus manos el celular del detenido general PNP Max García, desde donde se corroboraron chats y llamadas entre los investigados que dan cuenta de la coordinación que existió para los irregulares ascensos.