Realidad electrónica: ¿Las redes sociales han opacado a los blogs?
Por: Juan Mujica
Es muy evidente que en estos nuevos tiempos las redes sociales como el Facebook y el Twitter, sean y estén consideradas como herramientas esenciales de la comunicación y la globalización de los medios de comunicación. Tal vez porque el común de la gente quiere una comunicación inmediata y de mensaje corto. A lo mejor no desea una mayoría profundizar mucho, ni que le cause stress cada vez que desee conectarse y por ello optan por los sistemas que le proporcionan una facilidad para comunicarse en el acto y en tiempo real a todos los rincones del planeta.
Me causa sorpresa de repente porque no pertenezco al común de esa mayoría. Como periodista y escritor me es placentero acuñar casi siempre día a día algún texto en mis dos blogs. Es como una necesidad, como una catarsis. Y eso no es todo, ya que en todo el mundo hay escritores que poseen su blog o página web. También ellos me cuentan sobre su pasatiempo o necesidad de escribir o postear algún contenido que pueda ser leído por sus contactos y/o seguidores.
Diariamente cuando me conecto y chequeo mi Facebook, soy testigo sobre la lúdica y seguramente entretenida, aunque otras veces seria, publicación de los más variados mensajes, fotos, videos, convocatorias, etc, que mis contactos y amigos acuñan en el muro. Realmente es muy interesante, pero a la vez existe la tendencia a que se lancen las indirectas. Sin embargo, normalmente hay una atmósfera de paz, aunque también de llamada de apoyo y hasta de denuncia.
Hace poco un periodista y blogger peruano fue sentenciado a pagar 350 mil soles y más 3 años de pena privativa de la libertad, o sea cárcel efectiva. Por haber difamado a un ex ministro y ex congresista, publicando contenidos en que se le ve implicado en situación delictiva. Es decir, que ahora se puede arrestar a los bloggers. Esto no tiene precedentes, y lo que sí me induce a afirmar es que ya tenemos el mismo peso que una página web, o que un periodista digital, y que en muchos casos lo somos. Entonces, significa que los bloggers ya están siendo tomados en cuenta y siendo fiscalizados, lo que nos obliga a tener más responsabilidad en nuestros contenidos y que la libertad de expresión sea muy juiciosa.
No obstante, volviendo a las redes sociales, no extrañaría que de repente empiecen a fiscalizar el contenido que se publica en el Facebook, Twitter y demás redes. Eso realmente sería insólito e inaudito. Además que la ley se ganaría a un gran enemigo como son los medios de comunicación, si es que no lo son ya. Por lo pronto, se ve cómo canales de noticias como CNN en español utilizan mucho las redes sociales para abocar las opiniones de la gente, de sus televidentes en toda la comunidad de hispanoparlantes.
Me temo que pasará mucho tiempo todavía, 15 ó 20 años en que las redes sociales continúen siendo los reyes de la comunicación inmediata. Sin embargo, los blogs también continuarán profundizando en sus contenidos y siendo soslayados por los portales de internet. Además ahora habrá más control y los bloggers pensarán bien antes que publicar cualquier barbaridad. No obstante, también se daría el caso cuando se trata de blogs de noticias o de artículos que estén cerniéndose a informaciones fidedignas, que también estarían en su derecho de publicar lo evidente, ya que no se puede tapar el sol con un dedo.
Entonces, por último, vaticino que las redes sociales y los blogs continuarán un buen tiempo siendo reyes en sus respectivos castillos globales, sin embargo, siempre habrá una tendencia a que las redes sociales posean un poco más de aceptación y uso que los blogs. Y en general, no dudo en sospechar que algún día el Internet reemplazará a la televisión y a la radio. Y será un cambio revolucionario que no podremos evitar, gracias a la multifuncionalidad de este gigante de la información, quien día a día lo necesitamos más y le es útil a más y más gente, que se ve envuelta en la gran telaraña de la red desde 1969, hasta que la gran revolución tecnológica futurista vea eclosionar a un nuevo rey de la comunicación.