Designaciones a dedo, sin respetar el proceso concursal; ha salido a la luz luego de una exhaustiva investigación del programa dominical Panorama, en donde se comprobó que el Ministerio de Salud transfirió S/. 79.577.471 a Unicef para la compra de más de 10 mil productos vinculados a la refrigeración de las vacunas contra el coronavirus en nuestro país. Sin embargo, el Minsa no pidió a este organismo internacional buscar el mejor proveedor, sino que le especificó qué comprar y a quién.
La Resolución firmada por la entonces ministra de Salud, Pilar Mazzetti detalla en los anexos los productos que Unicef debe adquirir. Se especifican modelos, códigos e inclusos la marca del producto.
Según el reportaje emitido el día de ayer, la marca beneficiada con la compra es VESTFROST, una compañía de origen danés que fabrica refrigeradoras y congeladoras para diversos productos, incluido los médicos. Sobre esta marca la Organización Panamericana de la Salud (OPS) advirtió hace 2 años que habría riesgo de congelación de vacunas.
En mayo de 2019 se registró una primera alerta en la que se reportó congelación de vacunas y un mes después se dio la suspensión de ocho modelos de refrigeradores para vacunas de la marca VESTFROST por el mismo motivo, estas dosis quedaron inservibles y quizás se inocularon y no protegen a la persona de las enfermedades.
Lo reprochable de esta contratación no solo es que se haya direccionado al ofertante sino que no hubo interés, en plena época de pandemia donde los recursos son escasos, de buscar al mejor postor, que ofrezca un producto de alta calidad y que haya pasado por estudios técnicos que demuestren su utilidad para la conservación de medicinas.