El arco iris en las manos se viene presentando en el teatro del Centro Cultural Ricardo Palma de Miraflores. Aquella obra fue galardonada en 2015 con el tercer puesto en el Concurso Nacional de Nueva Dramaturgia Peruana.
La puesta es un drama que cuenta la historia de una chica transgénero, que no hace otra cosa que luchar contra la sociedad que la alberga, para dejar de ser invisibilizada y vulnerada en sus sueños y quehaceres. Prácticamente es un tributo al amor que todo ser humano debe recibir. Las actuaciones son sorprendentes y dejan sin aliento a más de uno en sus butacas. Conversamos con el autor de la obra Daniel Fernández:
Daniel, tienes una formación en Antropología. Cuéntanos
Yo primero era bailarín de danza folclórica, y a raíz de eso comencé a estudiar antropología. Mi visión era ser un folclorólogo, pero luego por cuestiones de trabajo comencé a ver cosas de logística, y acabé trabajando en una mina como asistente de almacén y luego como supervisor de almacén de una clínica. Hasta ese momento que fue antes de escribir, mi visión de futuro era seguir en el programa de logística, porque yo soy muy ordenado, y pensé que estaba en el lugar adecuado.
¿Y cómo surge entonces el hecho de escribir una dramaturgia?
Lo que pasa es que en el año 2015 en las horas de almuerzo comencé a probar y me puse a escribir. Hice unos monólogos, y me gustaron; pensé que podían ser una novela o un cuento corto; pero jamás pensé en teatro. Entonces me enteré que existía un concurso de teatro llamado Sala de parto, y quise escribir teatro, entonces mandé una obra al concurso, y no gané; y cuando salieron los resultados del concurso, ese mismo día comencé a escribir mi segunda obra Elarco Iris en las manos con toda esa carga de tristeza que me había provocado no ganar el concurso; pero luego, supe que había el Concurso del Ministerio de Cultura en el mes de septiembre; por eso la escribí, y tuve la amable asesoría de un dramaturgo llamado Gonzalo Rodríguez Risco.
¿Cuantos folios tiene la obra?
90 folios, y se supone que dura una hora y media.
Terminado el concurso, tu obra quedó en tercer lugar
Para mí fue toda una sorpresa, porque yo cuando la mandé pensé que era un tema importante que podía llamar la atención, pero nada más; y cuando quedó tercera, fue muy motivador y me dio impulso para seguir en esto. Y justo en ese momento me había matriculado en mi primer taller de dramaturgia con Alonso Alegría para hacer obras de 15 minutos, pero de repente salí premiado con una obra de 90 minutos; fue algo sorprendente.
La obra trata un tema latente; me refiero la vulneración que se comete contra las chicas transgénero ¿Por qué se te ocurre enfocar aquella problemática?
Porque a mí me ocurre un sinsabor gigantesco. Unos años antes yo conocí a dos chicas transgénero en una sesión de fotos, y apoyé donde ellas eran modelos. Me sorprendió mucho cuando vi, que estaban llenas de energía y sueños, pero por más que querían volar para hacer todo lo que deseaban; ellas mismas se anulaban, y se decían: “No puedo porque soy una transgénero” incluso uno de ellas daba charlas a otras chicas porque estaba capacitada, pero estaba donde le habían hecho creer, donde pertenecía, la calle. Y a mí eso me dio mucha tristeza. Las transgénero se han creído eso, porque la sociedad les ha dicho hasta el cansancio que no hay otro camino. Luego yo pensé: si un día me voy a atender donde un doctor, y de pronto sale un doctor que es travesti ¿Me quedo o me voy? Y no me pude responder esa pregunta.
Foto: Sol Moscoso Cervantes.
Hemos crecido en una sociedad pacata
Así es. El problema no son ellas; el problema es la sociedad que tiene como zona de confort verlas en las peluquerías y verlas paradas en las calles; y así nos sentimos cómodos.
¿Qué otras taras le ves a nuestra sociedad local?
He tenido la suerte de visitar otros países, y aquí nomás en Chile y en Buenos Aires tú ves a gente oficinista que tiene el cabello de múltiples colores, y con piercings, y ellos trabajan normal. Por ejemplo en el Banco de la Nación del aeropuerto de Argentina la persona que me atendió era un hombre con un piercing gigante de toro en la nariz. ¿Tú crees que eso pasaría aquí en Lima? Si desde que estas en el colegio te dicen que no puedes tener el cabello largo porque serán un mal alumno.
Pese a ello creo que también hay más apertura en función de otras décadas
Seguramente que sí, pero qué sería de Perú, seguramente seriamos una especie de isla.
Hablemos de “El arco iris en las manos” ¿Ha sido tu primera obra escrita puesta en tablas?
Así es, la primera vez.
¿Cómo se financió? Porque tengo entendido que el Mincul solamente financia la producción para la obra que ocupa el primer lugar.
Yo me contacté hace un año con Dusan Fung que es el director de Imaginario Colectivo, y yo no sabía nada de teatro, pero quería la posibilidad de que se monte mi texto; entonces un dramaturgo (Sebastián Eddowes) al que contacté por Facebook la leyó y me dijo: Dusan es el indicado; entonces lo busqué también por Facebook, lo contacté, le hablé y también la leyó, y también le gustó, nos juntamos en la Católica, y me dijo que era complicado, pero que quería hacerla. Luego de algunos meses, me dijo que su productora Imaginario Colectivo había decidido hacerla, y comenzaron a trabajar con Mónica Risi, y Wily Guerra. Ellos han sido los que se han encargado de buscar el financiamiento; incluso ganó un premio de un fondo europeo, y eso ayudó mucho, y también hubo una campaña de crowdfunding pero que no fue tan eficiente; pero el trabajo que hicieron por otro lado, felizmente pudo cubrir la producción.
La interpretación de los actores ha sido increíble. Ellos se reflejan en los estereotipos de los personajes del mundo
Lo que pasa es que mi primer intento fue no caer en clichés, pero el mundo está llenos e clichés. Definitivamente la obra trata de resaltar el tema de la aceptación familiar, (que Marita sea aceptada por su madre) pero ella la rechaza, pero apenas la acepta si es que recibe dinero de Marita. Hice esto porque generalmente en la sociedad en que crecimos se dice que la madre nunca te falla, y que cualquier persona te puede abandonar, pero menos la madre. Pero yo me planté ¿cómo sería la lucha de alguien que no tuviera el apoyo de nadie?, y que más bien ese lugar seguro que busca no lo encuentre precisamente en la madre, porque precisamente esa madre la bota de la casa, y la maltrata, y le dice que no podrá ser otra cosa en su vida: que puta, o peluquera.
Marita es un personaje que impacta, y pese a ser una chica de la calle, está llena de amor
Lo que me gusta de Marita es que ella quiere amar y quiere que la amen; pero tampoco es ese personaje buenito de las novelas mexicanas que sea incapaz de hacer algo que vaya contra las buenas costumbres; pero Marita sí, porque es trabajadora sexual, y ella no anda con medias tintas, y busca el amor de su pareja “Revolver”, y desea que ese macho latino la ame.
Entonces ¿Revolver no es tan malo?
Cuando uno ve a Revolver al comienzo dice que es un desgraciado, un machista aprovechado; pero él es así, porque así ha sido criado como esos machos que piensan que meterle la mano a una mujer está bien. Él ha sido formado como una bestia, porque piensa y reacciona como una bestia.
En el fondo muchos de nosotros hemos tenido algo de “Revolver” por dentro, pero no lo admitimos.
Pero por supuesto. Todos los hombres que pensamos que están bien todos los privilegios que las mujeres no tienen, y decimos hombre es hombre; y que uno puede ser infiel porque es hombre. Y Revolver es simplemente eso; él es el reflejo de eso. Él ama a Marita, pero no quiere admitir en su fuero interno que él también es homosexual, y no lo hace porque tiene que ser un macho como sea.
La obra tiene pasajes muy sexuales
Yo decidí que tenga partes sexuales porque en el contexto de las mujeres que trabajan sexualmente como Marita y Vandrea, el sexo tenía que estar presente. Y en un contexto donde la madre también es trabajadora sexual tiene que estar presente eso.
¿El público está aceptando bien la temática de la obra?
La verdad yo creo que no. Y si bien estoy entrando al terreno de la especulación; puedo ver cosas en mi facebook, porque yo publicito textos, y pongo fotos de la obra, y hay poca gente que se une a esto. Y se nota cuando publicas otra cosa y tiene más de cien likes. El tema no es familiar, y no es para menores, pero cuando en el teatro Ricardo Palma ha habido comedias la sala se llena de gente. Y esta obra que toca el tema de mujeres transexuales por amor, por derechos, y por aceptación; obviamente, ante eso la gente no piensa venir con la abuelita, pero deberían, incluso tengo muchos amigos que sé que no van a venir a ver la obra, quizás por cuestiones religiosas.
Entonces es una obra difícil
Es un tema difícil desde que la escribí. Yo sé eso, y estuve seguro de que si iba a ser premiada, no iba serlo con el primer puesto, porque sabía que el tema era complicado.
¿Y cómo se han portado tal los medios?
Casi no hay publicidad en los periódicos, y solo hay algunas notas muy pequeñas. Incluso el programa de teatro Tercera Llamada del canal siete no la va a programar.
Y ¿por qué? ¿Qué argumentan?
Básicamente han dado dos argumentos: que hay desnudos que no pueden emitir, y porque ese tipo de teatro tampoco es apto para ser grabado. Y ambos argumentos son fácilmente refutables, porque ellos siempre han reproducido otras obras con desnudos y semidesnudos. Incluso he visto obras con lenguaje soez en Tercera Llamada. Para mí es un tema político, porque el canal del Estado no se va a arriesgar a que una mayoría política les diga qué están haciendo. Y cuando pasaron la obra “Mucho ruido por nada” donde los actores estaban vestidos de mujeres haciendo una obra de Shakespeare, hubo cierto ruido; ¿te imaginas con mi obra? Yo comprendo que no se quieren comprar un pleito, pero finalmente esto es arte.
Es lamentable, porque la obra tiene gran calidad
Gracias por todo eso. Y es cierto, ha habido críticas muy favorables como la de Percy Encinas de El Comercio, y Eduardo Adrianzén en su propio facebook habló bien de la dirección, de las actuaciones y el texto. Y Alonso Alegría ha dicho que es un texto poderosísimo, y que le encantó las actuaciones.
Por lo general los dramaturgos se disgustan por la forma cómo sus directores adaptan sus textos originales
Es la discusión eterna del director y el dramaturgo, pero felizmente, para ser mi primera experiencia yo me encuentro muy complacido. El texto ha sido un tanto recortado, porque era muy largo, por eso yo mismo hice una versión más corta, porque Dusan me dijo que la revise, y yo mismo fue quien la editó. El final que se marcó para el estreno difería del texto original, y terminaba con un parlamento de la protagonista que denunciaba los abusos de nuestra sociedad contra las transgénero; y eso no está en el texto original, porque simplemente fue una licencia del director; pero ahora se ha modificado para el resto de funciones, y el final será como el original.
Para terminar: ¿Te consideras ya un hombre de teatro?
Yo desde hace un año ya no tengo un trabajo “normal” de oficina, ni nada de eso. Ahora ando participando en proyectos y en cosas que tienen que ver con teatro. Sigo escribiendo y estoy terminando un musical con un gran músico joven llamado Sebastián Abad; y estoy en una creación colectiva con dos buenos actores también jóvenes. También tengo unos proyectos con Haydeé Cáceres y su hija Trilce Cavero, y estoy muy metido en ello. He trabajado con Alonso Alegría en su obra Bolognesi en Arica, y he sido su jefe de escena, y hemos estado en Tacna.
El teatro realmente me apasiona… es algo que no había sentido nunca con cualquier otra actividad anteriormente. Y yo voy a seguir en este ambiente porque es otra cosa… he descubierto algo grandioso que me ha regalado la vida.
El Dato:
Obra: El arco iris en las manos
Autor: Daniel Fernández
Dirección: Dusan Fung
Actuaciones: Tatiana Espinoza, Miguel Álvarez, Miguel Dávalos, María José Vega y Eduardo Ramos.
Producción: Imaginario Colectivo, Guillermo Guerra y Mónica Risi.
Lugar: Centro Cultural Ricardo Palma Av. Larco 770, Miraflores.
Del 7 de setiembre al domingo 8 de octubre de 2017, de jueves a domingo a las 8:00 pm
Entradas: General S/35.00, estudiantes y mayores de 60 años S/20.00. Venta a través de Joinnus, y en la boletería del teatro.