El polémico movimiento social global conocido como “Amnistía Internacional” (AI) plantea como organización, sostener un vínculo con los abusos sobre los derechos humanos que están teniendo lugar en sus países o regiones que integran el mercado común mundial.
En el Perú, los movimientos sociales subversivos se han caracterizado por ser una expresión de los conflictos, protestas y movilizaciones sociales que exigen un cambio social y sus necesidades de manera pública y abierta.
Según el estudio “Mapeo de Movimientos Sociales en el Perú Actual: Proyecto Movimientos Sociales y Pobreza” (https://tinyurl.com/reyzcy84) del Centro Peruano de Estudios Sociales (CEPES), el concepto de movimiento social en el Perú: “En la práctica, sin embargo, el concepto de movimiento social adolece de ciertos problemas, tanto al momento de usarlo con fines de análisis como en la misma práctica política. Las dificultades son varias. Primero, ¿cuál es su referente empírico? ¿Cómo distinguir entre una organización y un movimiento? ¿Cómo distinguir entre un movimiento y una movilización? Estas preguntas son aun más complicadas porque (…) las organizaciones y las movilizaciones son empíricamente mucho más obvias e identificables que un concepto como ‘movimiento social’”.
En este sentido, es nuestro deber señalar que el polémico movimiento social global Amnistía Internacional considera mediante un comunicado publicado por el “Día de Acción Global por el Acceso al Aborto Legal y Seguro” que en el Perú, necesariamente se tiene que despenalizar el aborto, eliminar las normas que criminalicen el aborto y rechazar las iniciativas sobre la decisión política del derecho al aborto biológico.
A juicio de Amnistía Internacional (AI), nuestros funcionarios públicos tienen que promover nuevas normas para “garantizar un aborto seguro, a través de servicios de salud reproductiva universales, accesibles y oportunos, y una educación con enfoque de género, que asegure el derecho a la educación sexual integral”. (https://tinyurl.com/mr3bawwk)
Este movimiento social también es un problema social latente debido a que tiene en su poder documentos sobre el control mental.
Además, debemos señalar que la Defensoría del Pueblo ha puesto de manifiesto que la ideología de género no existe según la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) de la Organización de los Estados Americanos.
De igual manera, el movimiento social Amnistía Internacional (AI) en la celebración de la Asamblea General de la Organización de los Estados Americanos (OEA) en Lima, donde presentó una carta abierta a los jefes de Estado de los miembros de OEA que describe la ideología de género que desaparece con el contexto pandémico.
En mi artículo titulado “Las mentiras de la ideología de género”, publicado en el diario El Mercurio de Cajamarca escribo sobre la ideología de género: “El problema se agudiza, cuando se pretende inocular la ideología de género e implantarla en las estructuras del Estado y de las instituciones educativas, incluso con su prédica malsana contra la Iglesia y todo tipo de institución religiosa, acusándolas de homofóbicas, tradicionalistas, retrógradas, sin ningún asidero. Por esta razón, el Poder Legislativo aprobó en primera votación el proyecto de Ley N° 904-2021-CR, que elimina la ideología de género de la currícula escolar nacional con 88 votos a favor, 17 en contra y 13 abstenciones, y quedó exonerado de la segunda votación por 91 votos a favor. No nos dejemos engañar ni manipular. El reconocer que solamente existen el sexo masculino y femenino no es ofender a nadie. Tal como lo dijo Jesucristo: ‘La verdad nos hará libres’”.
Por tanto, podemos mencionar sobre la ideología de género en el Perú que el aborto es ilegal, salvo en caso de amenaza de la vida o de la salud de la mujer, lo cual es conocido como aborto terapéutico.