Existen hombres con manías que nacieron de sus caprichos infantiles o desde alguna ausencia expresada en la búsqueda de artilugios o afectos con algún animalito como los hipopótamos de Mario Vargas Llosa o las mariposas de Nabókov. Entre la obsesión, el fetichismo o el hobby existe una cómoda vecindad. Hay obsesiones como los famosos reducidores de cabeza o el extraño gusto de Jean-Baptiste por coleccionar esencias de cuerpos humanos en su intento de alcanzar el aroma perfecto. Nuestro país ha brindado su aporte a la humanidad en cuanto a personalidades singulares. No solo tuvimos al gigante de Bagua, Margarito Machaguay o batimos los récords Guinness del cebiche más grande del mundo o de 2,352 parejas bailando la pampeña Arequipeña en setiembre de 2018.
El tiempo nos preparaba algo extraordinario. Edison Félix Tito Peralta, indígena Wanka, abogado de la PUCP y con estudios en la Universidad de California, con especialización en Derecho Público y Regulación por la Goldman School of Public Policy at Berkley ha decidido dar rienda suelta al extraño arte de coleccionar denuncias penales. Su talla académica lo dispone a conocer los peligros del tinterillaje y parece un abogado atento a los dramas del sistema de justicia. No creo que lo suyo sea una vanidad de figuretismo ¿Por qué entonces esta manía? ¿Algún complejo de defensor público frustrado? ¿Mucha televisión y superhéroes?
Tal vez se despierta cada mañana con un Código Penal en la mano y su diario “La República” en la otra o viendo su celular de última generación con las noticias. Si algo ve denunciable busca en su PC el formato, cambia el encabezado, un par de “otrossidigo”, y ¡a luchar por la justicia!
Ha denunciado al alcalde del distrito de El Tambo (Huancayo), Carlo Curisinche por llamarle “cholitos” a unos personas, a la surfista Vania Torres Olivieri por racismo al practicarse un maquillaje intentando construir un personaje andino, por el mismo delito al ex ministro de Vizcarra, Martín Ruggiero y a la ex congresista de Fuerza Popular , Martha Chávez. Sus afanes justicieros lo han llevado a denunciar hasta el mismísimo presidente declamador, Francisco Sagasti por “violencia y represión” en Virú, a Manuel Merino de Lama, y al congresista Edgar Alarcón (UPP), por el “presunto delito de conspiración, tentativa de sedición y usurpación.”
Ha sumado a su hoja de vida la denuncia contra el periodista Beto Ortiz y Willax por el “delito de grave perturbación de la tranquilidad pública”. Edison Félix en su apoteósica batalla escribió el 11 de marzo, en su cuenta Twitter, que desafía a debatir a Beto Ortiz sobre su denuncia que el mismo la firma como si el periodista fuera tan ingenuo. Como no puede con la ley recurre a la bajeza que todos repiten contra Beto y escribe: “Puedo llevar un pollo a la brasa para que te animes.” Entonces, lo que yo pensaba que solo era un caprichito de juventud vengadora termina por confirmar mis sospechas de estar ante un Sancho de la sinrazón. Te lo digo con cariño de cholo, Félix: la justicia no está para que juegues a la guerrita.
Posdata urgente: acaba de denunciar a Rafael López Aliaga por la “amenaza de muerte e incitación al odio” contra Pedro Castillo. Cosas de Macondo y de nuestros BRILLANTES abogados.
