Escribir textos donde la historia real está presente no es cosa fácil, quizás uno pueda tambalear en la interpretación o valoración de los hechos. Y más si esto implica (o implicó) casos sociales, tal como es el caso de Túpac Amaru II, don José Gabriel Condorcanqui, quien no solo expuso y sacrificó su propia vida, la de su esposa, Micaela Bastidas, y la de sus familiares y amigos, sino que arriesgó sus propias creencias y su estatus de “cacique” para redimir a los explotados y avasallados y darles la oportunidad de ser libres. Por eso, para él, va dedicado este metatexto o libro conceptual: El Evangelio de Túpac Amaru II, mi última novela.
¿Pero quién fue realmente Túpac Amaru II? ¿Qué es lo que hizo para recibir quizás la más brutal de las condenas? ¿Y por qué muchas organizaciones sociales, políticas y hasta extremistas toman su nombre?: El Movimiento de Liberación Nacional Tupamaru de Uruguay al que perteneció Pepe Mujica en los sesenta y setenta o los Tupamarus marxistas leninistas de Venezuela fundados en 1979 o la “Organización Barrial Túpac Amaru” de Argentina que tienen más de 150 mil adeptos y cuya líder principal fue secuestrada por el gobierno de turno. Aquí en Perú, en 1968, el gobierno militar de Velasco Alvarado le dio el título de “héroe” y se develaron muchas estatuas, colegios y avenidas a TAII. Años después aparecería un grupo armado que tomaría su nombre y en 1996 tomaría la embajada de Japón, un hecho que dio la vuelta al mundo.
Hay que recordar también que el primer Túpac Amaru fue sobrino de Atahualpa y último inca de la dinastía de Vilcabamba se levantó en 1572 y fue brutalmente derrotado. Después, aunque no hay mayores datos debemos suponer que también hubo otros levantamientos que pudieron tener a otros Túpac Amarus que se tendrían que sumar a las más de cien revueltas y revoluciones que sí se consignan en la época de la colonia. Y, por cierto, también está Túpac Shakur, un cantante de Hip Hop que fue muerto a balazos en una vendetta en 1996.
Quizás el primer acercamiento con TAII haya sido en el colegio, en las láminas “Huascarán” que mostraban a un hombre mestizo y fornido que es jalado por cuatro caballos o el poema “Canto Coral a Túpac Amaru” de Alejandro Romualdo. En todos los casos, la figura del héroe es emblemática y siempre nos deja con una incógnita, dudas y preguntas porque TAII solo obtuvo una sola victoria en Sangarará y después fue aplastado cruelmente por el yugo español.
“Túpac Amaru” significa serpiente resplandeciente y aunque se haya escrito centenares de textos dedicados a su enorme figura, hay que resaltar que no existe mayor historia ni datos, solo unos cuantos testimonios y su firma de puño y letra que aún se conserva en los archivos y registros religiosos. Por lo tanto, casi todo lo que se ha escrito de él es ficción o supuestos. Y esta vez no será la excepción. No se ha querido hacer aquí una novela histórica tradicional o aristotélica con un inicio, un medio y un final. Lo que hay aquí son retazos de la memoria de un hombre que se adelantó a su tiempo, incluso a la Revolución Francesa y liberó a los negros 15 años después de la independencia de Estados Unidos y, no solo eso, sino que la igualdad de la mujer fue puesta en la palestra con las combatientes mujeres y Micaela Bastidas encargándose de la estrategia y suministros de las tropas.
Porque lo que aquí hubo fue una revolución como bien dice Flores Galindo y nosotros asentimos. Una revolución cruenta que, según muchos historiadores, calculan en 100 mil muertos, aunque hay algunos que proponen un millón de indígenas salvajemente masacrados por las huestes españolas y que causaron una crisis demográfica en el sur de nuestro país. Y a pesar de que el nombre “Túpac Amaru” después de su derrota fue prohibido (aboliéndose los títulos nobiliarios de los indígenas) y eliminado completamente de cualquier texto y sus familiares muertos y sus hijos castrados no se pudo evitar que su memoria siga vigente y que las novelas o hechos ficcionados puedan suplir esa parte de la historia silenciada que no existe y que necesita, de forma urgente, reescribirse.
PD1: Presentación presencial en la Feria del Libro del Bicentenario: https://www.facebook.com/FILPeru/videos/457909459087203/
PD2: Presentación virtual de El Evangelio Según Túpac Amaru II: https://www.facebook.com/1112237568/videos/969259113669817/
PD3: Reseña en el diario Expreso: https://www.expreso.com.pe/variedades/rodolfo-ybarra-trato-de-recuperar-una-memoria-partida-en-mil-pedazos/
PD4: Reseña en el diario El Pueblo: https://www.verdaddelpueblo.com/2021/12/albricias-leamos-el-evangelio-de-ybarra.html?m=1