Por: Tino Santander Joo.
La semana pasada se votó el dictamen de la Comisión de Economía para derogar la Ley Antiusura N° 31143. Esta ley fue aprobada en marzo de 2021 debido a la presión de la movilización ciudadana contra la usura y la codicia del oligopolio bancario, que imponía e impone altas tasas de interés y cobros ilegales de comisiones.
La lucha contra los cuatro jinetes del apocalipsis (BCP, BBVA, Interbank y Scotiabank) es incansable. Los bancos controlan los medios de comunicación tradicionales, el Parlamento, el Gobierno, la SBS, Indecopi, el Poder Judicial, la Fiscalía y la PNP a través de “convenios institucionales” que la Junta Nacional de Justicia debe investigar para determinar si existen conflictos de interés.
El congresista Ilich López, de Acción Popular, ha señalado que esta ley fomenta la extorsión y el crédito gota a gota de mafias instaladas en el Perú, el mismo argumento de los banqueros y sus voceros. Parece que los congresistas de Acción Popular, conocidos como «los niños de Castillo», ignoran que el narcotráfico, la minería ilegal y el crimen organizado bancarizan todas sus actividades en Junín y Puno, lavando su dinero a través del sistema financiero peruano.
Ahora, los bancos podrán cobrar tasas de interés de hasta el 200% y comisiones por cualquier motivo. Este es el Congreso del fujimorismo, de Alianza Para el Progreso, de Avanza País, de Perú Libre, de Acción Popular y de Renovación Popular. Estos son los corruptos que buscarán volver al poder en 2026 en la farsa electoral de 45 partidos y 20,000 candidatos a diputados, senadores y parlamentarios andinos.
El congresista Ilich López, en coordinación con su partido, Acción Popular, y la bancada de «los niños», ha dado un golpe contra millones de familias, mientras sus precandidatos presidenciales, Alfredo Barnechea y Víctor Andrés García Belaunde, denunciaban el abuso y la prepotencia del oligopolio bancario en los medios de comunicación tradicionales ¿sabían que los parlamentarios de Acción Popular y su partido están al servicio de los bancos?
La izquierda parlamentaria y los demás grupos de derecha son cómplices de esta felonía contra el país. Los peruanos están advertidos sobre por quiénes no deben votar. Según el portal Peru-Retail.com, los bancos obtuvieron ganancias récord de S/ 10,325 mil millones en 2024. Estas ganancias exorbitantes contrastan con las altas tasas de interés y comisiones abusivas que afectan a millones de peruanos. Es urgente regular seriamente el sistema financiero siga beneficiándose a costa de los ciudadanos. La codicia, la usura, la maldad y el terror caracterizan al sistema financiero peruano.
El Perú no puede tener oligopolios que controlen la economía nacional. No podemos vivir esclavizados financieramente, pagando altísimas tasas de interés y sometidos a la usura que aceptamos indignamente. Tampoco podemos tener partidos y autoridades políticas al servicio de estos intereses.
Necesitamos un cambio profundo, una revolución social basada en la toma de conciencia sobre nuestros graves problemas nacionales. No podremos democratizar el crédito ni acabar con la usura y el terror de los bancos con los partidos políticos corruptos. Es urgente promover la libre competencia financiera. Es imprescindible desarrollar la minería para que esta financie la infraestructura agraria, la salud y la educación. Jamás tendremos seguridad ciudadana con corruptos en el poder. También es indispensable solucionar el problema de los 10 millones de peruanos que no tienen agua ni desagüe, así como construir carreteras, puertos, trenes y conectar todo el país con internet.
Nada de esto será posible en 2026 con los mismos corruptos de siempre y con nuevos aspirantes a corruptos. Solo nos queda la revolución social. La insurrección democrática significa la movilización de empresarios, agricultores, estudiantes universitarios y secundarios, así como de las Fuerzas Armadas y la Policía, para acabar con la ignominia y los traidores al Perú. No hay otro camino, no hay otra salida. Es mentira que las elecciones sean una solución; solo traerán más de lo mismo o lo peor de los corruptos. Ustedes tienen en sus manos el destino del Perú.