La virtual victoria de Donald Trump en Estados Unidos es un claro mensaje que los que le dieron su voto son aquellos ciudadanos que se encuentran cansados de la descontrolada ola migratoria, así como la pérdida de la hegemonía en cuanto poder político y mercantil por parte de China, el rival más próximo de Estados Unidos y quien desde los últimos años se ha ido acercando comercialmente con Latinoamérica.
El magnate de 78 años, de no aparecer darse ninguna sorpresa, se convertirá en el presidente número 47 de Estados Unidos, tras imponerse a la candidata demócrata Kamala Harris en los últimos comicios electorales de ayer.
El polémico candidato, quien sufriera dos intentos de asesinato durante su campaña, obtuvo 277 puntos de los 270 de los colegios electorales necesarios, frente a los 224 de su rival. El magnate ganó el estado clave de Wisconsin tras derrotar a la vicepresidenta en un campo de batalla crucial.
El Colegio Electoral es un órgano integrado por 538 delegados que eligen los estados en función de su población. El candidato ganador en cada estado, aunque sea por un solo voto, se lleva todos sus compromisarios con la excepción de Nebraska y Maine. El aspirante que llega a 270 gana las elecciones.
Acompañado de su familia y directivos de su campaña, anoche el ex presidente de Estados Unidos aseguró desde Palm Beach que gobernará para todos y que “juntos” harán un Estados Unidos mejor.
“El éxito nos va a unir, y vamos a empezar poniendo a Estados Unidos en primer lugar. No los defraudaré”, dijo durante un discurso de menos de media hora en el centro de convenciones en la costa este de Florida.
Trump se aseguró el control del Senado
Uno de los factores que podrían asegurarle una presidencia sin grandes obstáculos es la mayoría republicana en el Senado, lo que facilitaría la aprobación de sus políticas y decisiones clave. Con un Senado a su favor, Trump tendrá mayor libertad para implementar su agenda y enfrentar a un Congreso que podría estar dividido.
Como se recuerda, el republicano nunca se negó a aceptar la derrota hace cuatro años y provocó una insurrección violenta en el Capitolio, siendo condenado por delitos graves.