Responso para un abrazo. Tras la huella de un poeta es el más reciente documental realizado por Nora de Izcue, la primera mujer cineasta del Perú, quien fue amiga de César Calvo, el poeta de la generación del sesenta que esta película retrata a través de la memoria de amigos y familiares suyos. La proyección se realizará este viernes 22 a las 7:30 p.m. en el Centro Cultural CAFAE-SE “José María Arguedas” (Av. Arequipa 2985, San Isidro), luego habrá un conversatorio con la realizadora y su equipo de producción: Alejandro Legaspi (director de fotografía), Guillermo Palacios (sonidista), Ángel Moulet (guionista) y Pedro Bronzoni (editor). La entrada es libre.
Responso para un abrazo es el nombre de un nostálgico y desgarrador poema de César Calvo que Nora de Izcue ha elegido para titular su documental biográfico de setenta y tres minutos de duración.“César Calvo fue un ser excepcional tanto por su talento creador como por su exuberante y controvertida personalidad que lo hizo entrañable e inolvidable”, dice la directora, quien agrega que “los amigos más íntimos de César coinciden en que detrás de su modo exuberante, alegre y entrañable existía un ser tocado por la soledad y el dolor».
La madre del poeta, Graciela Soriano de Calvo, tenía 103 años y estaba completamente lúcida cuando fue filmada por Nora de Izcue para la película. Llegó a cumplir 104 y pudo ver la cinta poco antes de morir, hace unos meses. Junto a ella aparecen otros familiares y amigos del poeta como su hermano Guillermo, los poetas Arturo Corcuera, Reynaldo Naranjo e Hildebrando Pérez, su amigo Javier Dávila -personaje de su novela Las tres mitades de Ino Moxo- , la fotógrafa Charlotte Burenius -una de las tantísimas amantes que el poeta tuvo- y otros dos grandes amigos suyos que, lamentablemente, murieron hace poco: Antonio Cisneros y “el chino” Carlos Domínguez. “Me pregunto qué confluencia cósmica hizo que en aquellos años floreciera tantísimo talento al mismo tiempo en nuestro país”, escribió Eduardo Adrianzén, luego de ver el documental: “¿Será que fue una época en la que los ideales existían y lo ideológico teñía toda la vida y obra de los creadores?”
Nora de Izcue (Lima, 1934) es la primera mujer cineasta del Perú. Fue la primera en dirigir un corto (Runan Caycu, 1973) y luego fue también la primera en realizar un largometraje de ficción (El viento del ayahuasca, 1982). Asistente de dirección de Armando Robles Godoy en La muralla verde y Espejismo, en su larga trayectoria de más de cuatro décadas como directora consagrada fundamentalmente al documental, figuran también trabajos como: Guitarra sin cuerdas (1974), Canción al viejo Fisga, que acecha en los lagos amazónicos (1978), Color de mujer (1990), Elena Izcue, la armonía silenciosa (1998) y El viento de todas partes (2004).