Dictaron 36 meses de prisión preventiva contra exfuncionarios de confianza de Martín Vizcarra

El Tercer Juzgado de Investigación Preparatoria de la Corte Superior Nacional, con la actuación del juez Miguel Armando Quevedo Melgarejo, dictó 36 meses de prisión preventiva contra los exfuncionarios de Provías Descentralizado, Carlos Revilla y Alcides Villafuerte, como integrantes de la presunta organización criminal “Los Intocables de la Corrupción”, que lideraría el expresidente de la República, Martín Vizcarra Cornejo.

Carlos Revilla, es investigado por la presunta comisión de los delitos de organización criminal y colusión agravada. Por su parte, Alcides Villafuerte es indagado por los mismos delitos y también por el de lavado de activos en agravio del Estado.

El magistrado Quevedo Melgarejo, dispuso el “internamiento inmediato” en un centro penitenciario, que el Inpe determinará y la detención de ambos exhombres de confianza de Martín Vizcarra comprende el periodo desde el 30 de enero del 2024 hasta el 29 de enero del 2027.

Al término de la audiencia, la defensa técnica de Carlos Revilla anunció que formulará el recurso de apelación respectivo, apenas sean notificados de la resolución de prisión preventiva. Asimismo, la abogada de Alcides Villafuerte admitió que estaban “conforme en todos los extremos” de la medida dictada.

Si embargo, este caso podría desentrañarse antes de lo sospechado, ya que es de conocimiento público que Villafuerte aspira a ser colaborador eficaz en la investigación, dado que la quincena de febrero éste entregó medio millón de soles en efectivo al Equipo Especial de Fiscales contra la Corrupción en el Poder (Eficoop) lo que demostraría la verosimilitud de la coima recibida.

 Según la tesis fiscal, la organización criminal liderada por Martín Vizcarra cobraba el 3.5% del valor total de cada obra que se licitaba en Provías Descentralizado, del Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC).

Uno de los colaboradores eficaces, Juan José Enciso Torres, exmiembro de los comités de selección de Provías, reveló que cada vez que Villafuerte lo convocaba para participar en un comité, le entregaba S/50 mil para “cuidar los caballos”. Eso significaba que era para proteger a las empresas que ganaban finalmente la buena pro, dándole legalidad al acto. Además, Enciso Torres añadió ante la Fiscalía que cuando le reclamaban por el monto del pago, que era menor al porcentaje de la coima recibida del total de la obra, Villafuerte respondía: “es que tengo que repartir para arriba”.

Con respecto al caso de Revilla, el juez Quevedo Melgarejo, fundamentó que se le dictó prisión preventiva, porque, a pesar de tener arraigo domiciliario y familiar, él no posee arraigo laboral de calidad, ya que se encontraba trabajando en Proinversión hasta su detención preliminar, y se habría valido de su estabilidad en el Estado para cometer los delitos que se le imputan y que, según el reporte de Migraciones ofrecido por la Fiscalía, Revilla registra numerosos viajes al exterior, lo que demuestra su “facilidad para abandonar el país”. El juez también valoró que la prognosis de la pena alcanzaría hasta los 14 años de cárcel, y que, al pertenecer aparentemente a una red criminal, podría adquirir de ésta los recursos suficientes para evadir la justicia. “Sí existe un latente peligro de fuga”, concluyó.

Y con respecto a Villafuerte, el Ministerio Púbico también presentó un oficio con el reporte de Migraciones en el que se indica que posee oportunidades para salir del país, tanto a países de Latinoamérica, como a Europa. En algunos de ellos, incluso, no tienen tratado de extradición con Perú. Además, Villafuerte tampoco demostró tener arraigo laboral en el Perú. Quevedo Melgarejo indicó que “los delitos que se le atribuyen los habrían realizado en el seno de una organización criminal”, y si estuviera en libertad, dicha red podría ayudarlo a evadir la justicia.