Cuántica, la empresa implicada en el delito contra el orden financiero
El Ministerio Público y la División de Investigación de Delitos de Alta Tecnología (DIVINDAT) de la Policía Nacional se encuentran investigando a la firma Cuántica porque sus funcionarios desataron una campaña de desinformación que configura delito contra el orden financiero. Este informe muestra quiénes son.
Grupo Cuántica es el nombre de un grupo de empresas creadas entre el año 2013 y 2017. Entre sus variables se encuentran Cuántica Inversiones SAC, Cuántica Metals SAC, Cuántica Lab SAC, Cuántica Punta Hermosa SAC y Cuántica Mining SAC; ésta última dedicada a la extracción de minerales metalíferos no ferrosos y, a pesar de que fue beneficiada con el Reactiva Perú, actualmente tiene graves problemas económicos y arrastra deudas que se niega a pagar ante distintas entidades financieras. Según Sunat todas estas empresas figuran con domicilio fiscal en calle Leónidas Yerovi Nº 106, San Isidro.
Detrás de Cuántica se encuentran varios cuestionados personajes. El más visible es Joaquín Cabrera Arias Schreiber, quien recientemente ha sido involucrado en una investigación por delito contra el orden financiero. A esa denuncia se suma una investigación en curso a cargo de la División de Investigación de Delitos de Alta Tecnología (DIVINDAT) que está hallando las evidencias sobre una campaña difamatoria contra el Banco Alfin y la Corporación Coril mediante la cual los miembros de Cuántica Mining buscaron presionar de manera ilícita para para evitar el pago de sus deudas vencidas.
Unidad especializada de la PNP viene investigando campaña difamatoria.
¿Quiénes son los que están detrás de Quántica?
La cabeza notoria es Joaquín Cabrera Arias Schreiber de 40 años de edad, quien en el último tiempo arrastra un historial financiero lleno de deudas o de negocios extraños que terminaron truncos como la fallida compra de la mina Cobriza.
En efecto, lo de Cobriza —propiedad de Doe Run y con graves problemas laborales y sociales— fue un intento de compra que llamó la atención porque de pronto apareció Joaquín Cabrera como titular de la empresa Cobre de los Andes S.A.C. ofreciendo 22 millones de dólares para adquirir las acciones de la histórica mina.
Joaquín Cabrera Arias Schreiber durante la fallida compra de la mina Cobriza.
Era imposible que un empresario como Joaquín Cabrera Arias Schreiber, con serios problemas financieros y una pésima reputación, tuviese ese dinero pero éste respondió señalando que tenía el respaldo del fondo de inversiones canadiense Sprott Resource Holdings. Lo sorprendente fue que el 8 de abril de 2022, la liquidadora de Doe Run Perú, la firma Consultores A1, lo favoreció y se hizo público el anuncio de que “Cobre de los Andes S.A.C. había adquirido los activos de la Unidad Minera Cobriza por un monto de US$ 22 millones”.
Poco después, el 20 de mayo de 2022 la operación se vino abajo porque en la Junta de Acreedores, Doe Run Cayman (Grupo Renco) se opuso a la transacción y se descubrió que la empresa de Joaquín Cabrera, Cobre de los Andes S.A.C. había sido creada apenas dos meses antes, el 2 de febrero de 2022, con la única finalidad de participar en la compra de la mina Cobriza.
Cabrera Arias Schreiber salió de escena dejando atrás un brote de violencia social porque enojados por la caída de la venta que los dejaba desprotegidos, 250 pobladores asaltaron e incendiaron las instalaciones de la mina.
Un detalle no menor que podría pasar desapercibido es que Joaquín Cabrera Arias Schreiber pertenece a una alicaída rama de la familia Wiese, siendo su tío Gonzalo de la Puente, ex accionista y director de Banco Alfin (2020-2022) junto a Caridad de la Puente y distintos miembros familiares del grupo Wiese. Lo curioso es que todos los ataques contra el banco, han estado centrados en eventos ocurridos durante los años en que sus familiares fueron accionistas y directivos de la institución.
Junto a él operan en Cuántica Mining, César Sambra Díaz-Ufano de 47 años de edad, quien tiene el cargo de apoderado. Este personaje figura públicamente como partner de AON Perú Corredores de Seguro S.A. desde junio de 2019 hasta la actualidad. Llama la atención este vínculo porque AON es una empresa británica del rubro de seguros que habrá de preocuparse porque uno de sus funcionarios esté actualmente involucrado como presunto partícipe de los hechos que investiga el Quinto Despacho Provincial Penal de la Octava Fiscalía Corporativa Penal del Cercado de Lima.
César Sambra Díaz-Ufano.
Otro personaje que está inmerso en las investigaciones es Juliana María Silva Cabrera, de 41 años de edad quien se desempeña como abogada y apoderada de Cuántica Mining, la empresa investigada por el delito contra el orden financiero con el objetivo de no asumir sus deudas. Es curioso como una profesional que hasta hace poco trabajaba en el estudio García Sayán y destacaba entre sus cualidades las capacidades en debida diligencia y compliance, termine inmiscuida en lamentables eventos de índole delictivos. Juliana es también miembro activo del colectivo L+1, asociación que busca generar bienestar social y crecimiento. Cabe preguntarse si esta asociación que promueve lideres responsables considera la ética profesional dentro de los valores relevantes de sus asociados.
La abogada Silva Cabrera es hija de Vicente Silva Checa y prima del investigado Cabrera Arias Schreiber. El vínculo de ambos personajes con Vicente Silva Checa tiene sentido porque, de acuerdo a las investigaciones de la DIVINDAT, una llamada telefónica realizada en el mes de julio pasado, lo muestra como partícipe en la campaña difamatoria con fines de extorsión contra el Banco Alfin y la Corporación Coril.
Juliana Silva Cabrera.
Silva Checa —quien purgó prisión preventiva de 36 meses al estar involucrado en el Caso Cócteles— hace muy poco recurrió a la llamada “Ley Soto” para solicitar al Poder Judicial la prescripción de los delitos de obstrucción a la justicia, falsedad genérica y falsa declaración por los cuales está denunciado. Lo que sorprende es que, de un lado, solicite el beneficio de la prescripción de ciertos delitos y, paralelamente, aparezca involucrado en los actos delictivos contra el Banco Alfin y Corporación Coril.
Vicente Silva Checa.
También está siendo materia de investigación para determinar la responsabilidad que le correspondería, Alfonso Javier de Orbegoso Baraybar, 62 años, presidente del directorio en Cuántica. Este personaje fue presidente del Comité de Riesgos, Cumplimiento y Sostenibilidad de la empresa Graña & Montero en pleno escándalo del megacaso de corrupción Lava Jato en el cual la brasileña Odebrecht tuvo directa relación con Graña & Montero.
Alfonso de Orbegoso Baraybar.
Otro personaje que tendría vinculación con el delito contra el orden financiero que el Ministerio Público investiga, es Erick Pegot-Ogier Pelagatti, 41 años de edad, quien aparece como apoderado de Cuántica Mining y, según diversas fuentes, tiene una gran cercanía con Joaquín Cabrera en diversas actividades.