Desde el Ministerio de Cultura y durante la gestión de la ministra Leslie Urteaga, se realizó una orden de servicio a favor de la empresa Joinnus de Credicorp. Esta orden de servicio nos hace recordar al escándalo de Richard Swing, ya que aquí también existe la falta de transparencia y de la misma forma que en el Gobierno de Martín Vizcarra, esta orden de servicio vendría impulsada desde Palacio de Gobierno por la presidente Dina Boluarte.
Según nuestra fuente, desde un inicio desde Palacio se habría avalado la contratación con una adenda millonaria a favor de Credicorp. La jugada fue hacer una contratación directa por 36 mil soles, un monto que no supera las 8 UIT para así evitar la licitación. Pero esta contratación que tanto defiende la ministra Leslie Urteaga, vendría con una millonaria adenda, donde se señala que la empresa Joinnus cobraría el 3.9% (incluido impuesto) por cada boleto vendido a Machu Picchu o Camino Inca.
Es decir, la empresa de Credicorp que pertenece a Dionisio Romero —quien entregó US$3 millones 650 mil dólares a la campaña de Keiko Fujimori— se llevaría cada año más de 10 millones de soles por hacer los mismo que se venía haciendo desde la Dirección Desconcentrada de Cultura de Cusco: vender boletos electrónicos. Aquí hay varias preguntas ¿Por qué se busca beneficiar con cifras millonarias a una empresa privada como Joinnus? ¿Por qué no se consultó al pueblo cusqueño? ¿Por qué se insiste en un proceso de contratación que tuvo irregularidades?
En una reciente entrevista en Lima Gris, el congresista Guido Bellido señaló: “para la nueva plataforma de adquisición de boleto de la empresa Joinnus, no ha participado el área usuaria. Entonces, esto es totalmente contraproducente que en una contratación de un sistema el área usuaria no haya participado y los Términos de Referencia (TDR) no hayan sido formulados por ellos”.
Por otro lado, los propios funcionarios del MINCUL que pertenecen al SITRACAS manifestaron: “los equipos técnicos, tanto de informática como el área de administración y abastecimiento, han indicado que el procedimiento como se ha llevado esta contratación de Joinnus menor a 8 UIT, no está enmarcado dentro de conducto normativo”. Claras irregularidades que vienen siendo observadas por el pueblo cusqueño.
¿Acaso estamos ante otro capítulo de corrupción en el Perú? Se espera la inmediata intervención de la Fiscalía Anticorrupción.