Contraloría: Jefe del Comando Conjunto de las FFAA insistió en compra de blindados por US$ 64 millones a empresa descalificada
El jefe del Comando Conjunto del Ejército David Ojeda Parra habría intentado manipular un procedimiento de adquisición de vehículos blindados, en un proceso que la Contraloría ha descrito como “irregular”.
Jefe del Comando Conjunto del Ejército David Ojeda Parra.
La Contraloría General de la República identificó irregularidades en la adquisición de 30 vehículos para el transporte blindado con vehículos portatropa a ruedas para la 3ra y 6ta brigada blindada del Ejercito-de Estado a Estado.
Según el informe de Acción de Oficio Posterior N° 025-2023-2-0284-AOP que halló irregularidades en la compra de los vehículos blindados, quien sería el principal beneficiario sería el general David Ojeda Parra, quien acaba de asumir la jefatura del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas. Además, en el documento se destaca que la institución encargada de seleccionar al proveedor de estos autos “no desempeñó sus funciones con transparencia”.
El informe advirtió una serie de irregularidades respecto al proceso que la Comisión de Estudio Técnico Operacional del Ejército (CETO) había desplegado para la adquisición de 30 unidades de vehículos blindados ARMA, para la que la empresa turca Otokar postuló en su momento.
Según la Agencia de Compras de las Fuerzas Armadas ACFFAA, el expediente inicial en el que el Jefe del Comando Conjunto solicitó la contratación, fue devuelto “pues encontró que varias empresas se habían quejado porque nunca recibieron respuestas a los cuestionamientos que hicieron al proceso”.
Dicha precisión fue refrendada por el informe del Órgano de Control Institucional del Ejército adscrito a la Contraloría el cual detalló que “la CETO no habría evaluado de forma clara la propuesta de la empresa que ocupó el primer lugar de prelación (Otokar); referente a los límites máximos permisibles de emisiones atmosféricas y garantía técnica y/o comercial, las mismas que difieren de los requerimientos técnicos mínimos solicitados (…), (por lo que) no debió ser admitida”.
General David Ojeda Parra.
El intento de esta contratación superó el presupuesto que el Ministerio de Defensa había dispuesto para el Ejército. En un inicio, se contempló que el monto máximo a gastar para la adquisición de estos vehículos era de US$60 000 000; sin embargo, la adquisición final de estos 30 blindados terminaría por suponer al Estado peruano un total de US$64 625 605.
La responsabilidad directa de esta licitación cuestionada, ahora ratificada con los documentos de la Contraloría recaería en el General de División del Ejército, David Ojeda Parra, quien habría presionado a la ACFFAA “para que procediera a la compra de los blindados”.
En sus informes, detalló que el 17 de marzo del 2023 el mismo Ojeda nombró a los integrantes de la Comisión de Estudio Técnico Operacional del Ejército. Dejó en la presidencia de dicho organismo a Julio Ruiz Juárez, a fin de que este dispusiera la elección del modelo; quien finalmente se decantó por la empresa que Ojeda Parra solicitó atender.
Finalmente, la irregularidad que quedó registrada por la Contraloría solo recomendó al Comandante General del Ejército que “adopte las acciones que corresponden en el ámbito de sus competencias a fin de atender o superar el hecho como indicio de irregularidad y, de ser el caso, disponer el deslinde de responsabilidades que corresponde”.
Según lo detallado en informes previos, existieron hasta tres oportunidades en las que el Jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, David Ojeda Parra, ejerció presiones para forzar la compra de los 30 vehículos blindados de la empresa turca cuyas deficiencias fueron advertidas por la Contraloría. Estas insistencias fueron resueltas en su momento por la Agencia de Compras de las Fuerzas Armadas por medio de tres oficios de respuesta a Ojeda.
La primera vez, le detallaron que “no resultaba viable proceder a la admisión”, pues la propuesta de la empresa “supera el valor referencial establecido en el requerimiento final y el monto autorizado por el Ministerio de Defensa”. En una segunda oportunidad, la ACFFAA reitera que la dirección “se ratifica en que no se podrá continuar con siguientes etapas de la contratación (…) hasta que se realice la reformulación correspondiente”.
Pero la ACFFAA volvió a responder a un tercer intento de presión en el que detalla que “ha emitido un pronunciamiento definitivo que habla sobre las deficiencias insubsanables en la contratación materia del asunto”.
El vehículo ARMA 8×8 de Otokar se caracteriza por su diseño modular y su adaptabilidad para diversas operaciones militares, tales como el traslado de tropas y las operaciones de combate de infantería. Presenta una estructura monocasco que le confiere la capacidad de flotación, desplazándose hasta 9 km/h en medios acuáticos. Su envergadura de 8x3x2.45 metros le permite transportar hasta 40 toneladas, incluyendo diez fusiles y dos operadores.