Parlamentarios entran en coordinaciones para iniciar los mecanismos de control. Renovación Popular solicita al pleno del Congreso que se convoque al premier Bellido y al titular del Interior, Juan Carrasco.
Las distintas bancadas y sus congresistas tienen en la mira a los ministros cuestionados, y se plantea una interpelación a los ya mencionados. En respuesta a esta acción, se cree que habrá una barrera para evitar la debilitación del Poder Legislativo en caso de un voto negativo a favor de la confianza al gabinete, en una posible disputa con el Ejecutivo.
Jorge Montoya, vocero de Renovación Popular, mencionó que esta decisión fue tomada luego de que la Presidencia del Consejo de ministros (PCM) emitiera un comunicado que menciona todo lo opuesto a lo que esta bancada tenía afirmado y pedido en un oficio enviado a Guido Bellido.
“Ante el reciente comunicado de la PCM, debemos señalar, en estricto cumplimiento constitucional, que procederemos a interpelar ministro por ministro”, publicó Montoya en su cuenta de Twitter.
El día martes 3 de agosto, el comunicado emitido por la PCM negó rotundamente que existan relaciones entre ministros y agrupaciones terroristas, además exigió que se respete “la legítima aspiración del pueblo a pronunciarse sobre la posibilidad de una nueva Constitución”. Renovación Popular mencionó unas supuestas conexiones de ministros con subversivos y habrían hecho una solicitud al premier Bellido sobre “desistir de su pretensión de una asamblea constituyente para reformar la constitución”.
“Son mociones solamente para que vayan a informar. Son pasos que se van a ir dando poco a poco. Se va a aprobar en el siguiente (pleno), que es el próximo jueves. A partir de allí correrán las fechas para eso”, declaró Montoya al diario La República.
Menciona que no tienen en mente plantear una interpelación hasta el momento porque quieren avanzar cumpliendo los pasos que creen y consideran más prudentes ante la situación. “No estamos tratando de malograr acciones de gobierno, estamos haciendo los pasos más prudentes que podemos dar para que el Gobierno reaccione y cambie lo que está haciendo”.
Montoya afirmó que se mantiene en coordinaciones con otras bancadas, pero no quiso identificar cuáles eran.
“Pondremos en la lista a varios ministros. Poco a poco lo vamos a ir presentando porque, como lo hacemos diferentes bancadas, nos tenemos que poner de acuerdo”, añadió.
Las interpelaciones se comenzarían a dar si las explicaciones y argumentaciones de los ministros no llegan a satisfacer a los congresistas. Aparte de Bellido y Carrasco, se encuentran en el ojo de la tormenta el canciller Hector Béjar, conjuntamente con Walter Ayala (ministro de defensa), Iber Maraví (ministro de trabajo) y Anahí Durand (ministra de la mujer).
Zeballos, vocero de Acción Popular, mencionó que en primer lugar tendría que definirse si el voto de confianza es positivo o negativo. “Si una interpelación es consistente, apoyaríamos, pero mientras no se haya visto la confianza, el Gobierno pueda rectificar”.
Vocera alterna de Avanza País, Adriana Tudela, estima que las interpelaciones no se ejecutarían sino antes de otorgar el voto de confianza y por esa misma razón solo estarían invitados los ministros cuestionados a que puedan contestar.
“Que el presidente reflexione y no lleguemos al extremo de estar interpelando”, menciona José Jeri, perteneciente al partido Somos Perú – Partido Morado, quien aclara que no se descarta la interpelación, pero en primera instancia quiere que el diálogo sea agotado.