Anoche en el Congreso de la República, se evidenció la mediocre gestión de la ministra de Cultura Leslie Urteaga Peña. Temas como la oscura contratación de la empresa Joinnus, el crítico estado de Kuélap, la pretensión de eliminar el Certificado de Inexistencia de Restos Arqueológicos (CIRA) y la situación del elefante Blanco llamado Museo Nacional del Perú (MUNA) son una muestra de la negativa gestión de la ministra de Cultura.
Fueron más de 30 preguntas que tuvo que responder la titular del MINCUL. Por un momento intentaba torear las preguntas, calificando a la Dirección Desconcentrada de Cultura de Cusco (DDC), como una institución corrupta. Lo que no se dio cuenta Leslie Urteaga es que ella misma se estaría autocalificando de corrupta, ya que la DDC de Cusco es la representación del Ministerio de Cultura en la ciudad imperial.
Como titular de la cartera, la ministra tiene la completa responsabilidad de las irregularidades detectadas en su institución. Como mencionó el congresista Carlos Anderson: “la ministra tiene responsabilidad en la contratación de Joinnus”. Una contratación que ha sido calificada como irregular por la propia Contraloría General de la República, y la cual en unos días presentará un informe final donde se señalará con nombres y apellidos la responsabilidad penal y administrativa de los involucrados.
Por su parte el congresista Guido Bellido, mencionó: “Aquí nos dicen que Joinnus no va a ganar nada. Todo eso es cuento, porque en realidad existe una adenda en la que se indica cual es el porcentaje a la que va a acceder Joinnus. Si nosotros hacemos la operación del 3.9% por el ingreso anual de los visitantes a Machu Picchu, Joinnus se llevaría más de 10 millones de soles al año. Esto demuestra los intereses económicos que existen por querer entregar toda la operación a la empresa privada, y eso es privatizar Machu Picchu”.
Luego de la larga interpelación en el Pleno del Congreso, quedó claro que la gestión de la ministra Leslie Urteaga durante estos 14 meses se ha caracterizado por el caos, la desidia y la presunta corrupción. Se supo que, tras la interpelación, desde Palacio de Gobierno ya están buscando su reemplazo.