La congresista Rosangella Barbarán envió una carta (Oficio N° 443-2023/2024-RABR-CR) a la ministra de Cultura Leslie Urteaga, para que dé explicaciones con carácter de urgencia con un informe escrito a través de un reporte indicando cuáles fueron los procedimientos y criterios de asignación de presupuesto que tiene el ministerio para financiar películas nacionales.
Asimismo, la congresista solicita que se le remita cuáles fueron los montos destinados al financiamiento de películas nacionales de los últimos cinco años, y quiénes fueron las personas responsables y señalar los perfiles profesionales de los encargados de los procesos de selección de los proyectos cinematográficos que fueron beneficiados con el dinero público.
El pedido de la legisladora de Fuerza Popular, según explica en la misiva, obedece a la sensación de indignación de muchos peruanos, respecto al financiamiento de películas que relativizan las acciones y delito de miembros de grupos terroristas.
Carta de legisladora Rosangella Barbarán que envió a la ministra de Cultura Leslie Urteaga.
Asimismo, hace hincapié, a que se ha revelado que en el filme usan alarmantes términos que pueden distorsionar lo que significa el terrorismo en el Perú. Y añade, que eso es un mal contra el cual en el país se ha luchado tantos años, porque cobró las vidas de miles de compatriotas.
La solitud de información que requiere la parlamentaria, se da en medio de la exhibición de la película nacional, estrenada hace unos días en las salas peruanas, “La Piel más temida”, del director Joel Calero.
Cabe recordar que este director, ya ha realizado tres películas con el financiamiento del Ministerio de Cultura. La primera fue su opera prima “Cielo Oscuro”, luego “La última Tarde”, y actualmente, la cinta que se viene proyectando en las salas del Perú.
Por su parte la película “La piel más temida” recibió S/670 mil por concepto de Estímulos Económicos del Ministerio de Cultura; y “La última Tarde”, recibió S/710 mil soles.
Sin duda, los proyectos fílmicos nacionales deben tener el apoyo y financiamiento del Ministerio de Cultura; sin embargo, el denominado Concurso Nacional de Proyectos de Largometraje de Ficción, debería tomar en cuenta que también postulan cientos de realizadores de todas partes del país.
En ese sentido, el señor Joel Calero es muy afortunado, porque ha recibido más de un millón de soles para que realice sus películas que abordan la temática del terrorismo en el Perú, aunque ellos le llamen “Violencia Interna”.
Y es más afortunado, porque él se está presentando en medios periodísticos para publicitar su película, y eso es beneficioso para lograr más espectadores en las salas de cine.
Así las cosas, no tiene nada de malo, que la congresista Barbarán pida explicaciones a la ministra de Cultura para que responda cuáles fueron los criterios de financiar dichos filmes.
Asimismo, el director tampoco debería enfadarse si en algún momento, también es consultado por las razones que lo llevó a rodar dichas cintas; en especial, si se toma en cuenta que es amigo en Facebook de un terrorista asesino Peter Cárdenas Schultz, y que incluso, intercambian comentarios en dicha red social, a tal punto que el cineasta y docente de la Pucp en 2019, le pidió que cuando el terrorista Cárdenas anuncie el lanzamiento de su libro “La Base”, en Lima, le avise.
La solicitud de la congresista es valida, ya que se debe de fiscalizar como se distribuye el dinero para financiar películas peruanas. Si los directores nacionales no desean que se les cuestione, solo tendrían que filmar sus películas con su propio dinero, es decir, sin estirar la mano al Ministerio de Cultura.