Congresista Nieves Limachi presentó proyecto de ley para que un presidente no pueda ser vacado durante su primer o último año de mandato

Interesantes propuestas que deben de tomarse en cuenta y otras que solo buscan la aprobación popular, significando por ello no una verdadera solución. El día de ayer la congresista Nieves Limachi (Perú Democrático) —autora principal de la iniciativa— presentó un proyecto de ley de reforma constitucional “para el fortalecimiento de la democracia y vida política en el Perú” que, entre los cambios a la Carta Magna, busca que se evite la vacancia de un jefe de Estado durante el inicio de su mandato.

“El presidente de la República presta juramento de ley y asume el cargo, ante el Congreso, el 28 de julio del año en que se realiza la elección. No puede ser vacado, ni suspendido el primero y último año de su mandato”, se indica en la modificación que se plantea al artículo 116.

Asimismo, plantea que el cargo de congresista sea ratificado a mitad de periodo “mediante el voto popular de cada uno de sus distritos electorales” por el que fueron elegidos.

“El recambio por mitades se da con los 65 congresistas que obtengan el menor porcentaje de aprobación; quienes son reemplazados por su accesitario, y por el tiempo que resta del periodo parlamentario”, se detalla.

También propone que los candidatos a la presidencia y vicepresidencias de la República pueden integrar las listas de candidatos a congresistas, además de que ese cargo sea renunciable y que los parlamentarios no puedan ser ministros.

Ante eso último, la parlamentaria sustenta que “La función de congresista es incompatible con cargos similares en empresas que, durante el mandato de congresista, obtengan concesiones del Estado, así como empresas del sistema crediticio financiero supervisadas por la Superintendencia de Banca, Seguros y Administradoras Privadas de Fondos de Pensiones”.

Por otro lado, dentro del proyecto de ley, se señala que en el caso de haber una segunda vuelta electoral para la presidencia del Perú se dé con los tres candidatos más votados y ya no solo con dos, explicando que esa fórmula solo ha traído durante los últimos años una polarización entre los votantes.