Exigen respeto. Sus nombres no son “wantán” o “aelopuelto”. Nuevamente se abre la polémica sobre los programas humorísticos que tratan de representar a diversas comunidades minoritarias dentro de nuestro país. El último antecedente fue el caso del personaje de la “Paisana Jacinta” el cual fue vetado de todos los medios de comunicación.
El Bloque Asiático Peruano ha salido a denunciar presuntos actos de racismo y discriminación contra asiáticos descendientes durante el último programa del “Reventonazo de la Chola” emitido en América TV.
“Actores usando maquillaje y prótesis en los ojos para ‘parecer’ coreanos. Además, se burlan de nuestros acentos y se apodan ‘kam lu wan tan’, ‘siu mai’, o ‘aelopuelto’”, se lee en el comunicado vía Twitter.
Al respecto, la Defensoría del Pueblo ha hecho eco de esa denuncia pública, recordando a todos los ciudadanos peruanos y extranjeros que actos que denigren a un grupo étnico constituyen racismo y no deben ser tolerados.
La discriminación y el racismo están condenados en nuestro país
Cabe recordar que nuestra Constitución Peruana menciona en su artículo 2, numeral 2 que “Nadie debe ser discriminado por de origen, raza, sexo, idioma, religión, opinión, condición económica o de cualquiera otra índole”.
Asimismo, desde el año 2000, los actos de discriminación se tipifican como delito, de conformidad con el artículo 323 del Código Penal Peruano.
A esto se suma que la protección del individuo se ampara también en el ámbito internacional. A propósito la Convención Internacional sobre la Eliminación de todas las Formas de Discriminación Racial establece que la discriminación racial denotará toda distinción, exclusión, restricción o preferencia basada en motivos de raza, color, linaje u origen nacional o étnico que tenga por objeto o por resultado anular o menoscabar el reconocimiento, goce o ejercicio, en condiciones de igualdad, de los derechos humanos y libertades fundamentales en las esferas política, económica, social, cultural o en cualquier otra esfera de la vida pública (art.1.1).
Sin embargo, pese a contar con normativa contra actos racistas poco o nada se ha hecho para su erradicación. Muchas personas normalizan esas conductas y las validan dentro de su entorno, sin estar al tanto de que están promoviendo e incentivando ese tipo de conductas.
El caso de la “Paisana Jacinta”
El caso más emblemático y cercano de discriminación fue del personaje de la “Paisana Jacinta”, personificado por el humorista Jorge Benavides durante aproximadamente 20 años.
Luego de más de 6 años de lucha judicial el 15 de octubre del 2020 la Corte Superior de Justicia de Cusco ratificó la orden para que en canal Latina Televisión suspenda de manera definitiva la emisión de dicho personaje, al considerarlo una ofensa y un atentado racista a la dignidad de las mujeres andinas.
El personaje de Jacinta, interpretado por un hombre, presentaba a las mujeres andinas o cholas -como se conocen en Perú- como indígenas desdentadas, de caminar simiesco, escasa inteligencia, que hablan mal el castellano y objeto constante de burlas de los «limeños», más «blancos» y «civilizados». No en vano, ya había sido criticada por difundir estereotipos negativos de pueblos indígenas por el Comité para la Eliminación de la Discriminación Racial de las Naciones Unidas, además de recibir el expreso rechazo del Ministerio de Cultura en varias ocasiones.