Un terrorista menos es un asesino menos pero aquel que lo aniquila ¿es un héroe o un asesino?
¿Se puede hacer frente al mal sólo con el bien o con un mal mucho peor?
¿Aquel que vence al mal usando otra forma del mal, puede ser considerado un santo, un buen hombre o un héroe?
¿Alguien puede ver honor en una acción promovida por el fujimontesinismo?
Vamos.
Por otro lado, secuestrar civiles ¿es un valiente acto guerrillero o una cobarde acción terrorista?
No dudo que entre los comandos Chavín de Huántar hubo nobles guerreros pero los antecedentes de nuestras FF.AA. me inducen a creer que no todos merecen esa distinción.
Los «gallinazos» y sus viles ejecuciones, el lado oscuro de esta historia, sólo confirman el sello leproso del fujimontesinismo en este acto que debería ser casi glorioso pero que fatalmente degeneró hasta hacerse deplorable.
Como en toda historia, la política enturbia la debida objetividad y siembra mentiras hasta en el vacío.
Así, los fujimoristas, ávidos por seguir usufructuando su supuesto «triunfo» sobre el terrorismo, requieren y exigen héroes pero olvidan que estos no tratan con indeseables y corruptos. De hecho, si hubo héroes en nuestras FF.AA. durante el fujimorismo, estoy seguro que no defendieron a la dictadura sino que procuraron su caída, a ellos, en tanto existan, vaya mi reconocimiento.
Por otro lado, los izquierdistas que se empecinan en defender los DD.HH. de los terroristas mezquinando la tranquilidad de los ex-comandos no van a la zaga de los fujimoristas en todo lo que se refiera al ejercicio ilimitado del despropósito.
Ambas acciones y ambos grupos, es decir, los fujimoristas y los izquierdistas, obedecen a bajísimos propósitos «políticos» y son igualmente despreciables.
En síntesis, los Comandos Chavín de Huántar no fueron héroes ni asesinos, simples peones del gobierno de turno, cumplieron con su deber y fueron valerosos pero no extraordinarios ni inmaculados. Sin duda, no merecen la gloria inmortal pero tampoco la persecución y el descrédito.
Reitero, si hubo héroes en nuestras FF.AA. durante el fujimorismo, estoy seguro que no defendieron a la dictadura sino que procuraron su caída. A ellos, en tanto existan, vaya mi reconocimiento.