Regresé luego de un mes de vacaciones y me dio gusto encontrar y felicitar, por segunda vez, a mi estimado colega Franz Krajnik, por el primer puesto en el Concurso Nacional de Fotografía Eugene Courret, realizado en mayo pasado. Le pregunté si el premio le brindó algo de reconocimiento y me dijo que se mudaba a una agencia internacional. Luego de una risotada, supe que era una broma. Ayer por la noche salió de vacaciones.
El trabajo de Franz dio una paliza a los demás foto reportajes que participaron en el Courret. El tema elegido demolió por su interés histórico y coyuntural, sumado a su talento para capturar el momento y narrar una historia en fotos. Ganó porque fue el mejor con evidencia. Por ello, su serie de fotos no fue relegada por el jurado, al segundo, tercero, la mención honrosa o el grupo de 9 finalistas. Un aplauso desde estas líneas para mi querido colega Franz.
Primer puesto: «Uchuraccay»
El Concurso Nacional de Fotografía Eugene Courret, es organizado por Instituto de Educación Superior Tecnológico Privado «Centro de la Imagen” y en sus bases precisa que “premia el mejor reportaje o serie documental fotográfico”, no arte/fotografía, no subjetivo, no vanguardista.
Esta escuela de fotografía organiza los más importantes concursos, exposiciones y festivales de fotografía en ciudad de Lima desde hace varios años y cuenta con empresas de alto nivel comercial y como auspiciadores.
Lo que resulta insólito y desconcertante de este concurso es que el segundo y tercer lugar fue otorgado a dos trabajos que alcanzan el nivel de un alumno de fotografía básica I. Dejando atrás a trabajos de gran nivel profesional, como dos foto reportajes de Ernesto Benavides, uno de estos había obtenido el “Premio SIP 2010 a la Excelencia del Periodismo” y el otro el segundo puesto en historias de noticias en el “POYI 2012” (Picture of the year). Dos premios de gran relevancia internacional. No entiendo como el jurado prefirió dejar para el puesto de honor el foto reportaje denominado “La Tercera Frontera”, de Leslie Searles, sobre los migrantes de Haití en la selva de Perú, de gran importancia temática, fuerza narrativa y compositiva.
Es mi opinión. Esta coincide con muchos de los que se han quedado mudos y han esbozado trabalenguas sin traducción en sus muros de facebook, porque no quieren “paltas” con sus amigos y los monarcas de la fotografía en el Perú. Pido perdón a las personas que realizaron estos trabajos por cuestionar su mérito en el Courret, no tengo ni quiero referirme a ellos de manera personal, les guardo el profundo respeto que se merece una persona que practica este oficio tan maravilloso que es la fotografía. Solo me referiré íntegramente al material fotográfico que presentaron en el concurso.
El segundo puesto del Courret lo ganó una ex alumna y actualmente docente del Centro de la Imagen, con el foto reportaje denominado “Aguas Populares”, donde se muestra a una serie personas bañándose en piscinas públicas. Lo pegué arriba para que lo comparen con los otros trabajos. El tercer puesto, lo ganó una profesora del Centro de la Imagen, con el trabajo titulado “Colección Natural”, el cual no merece ningún comentario.
Esta no es la primera vez que “Colección Natural”, gana un concurso organizado por el Centro de la Imagen. Recordemos que el Centro de la Imagen organizó en marzo del año pasado el III Salón de la fotografía ICPNA 2012 y dio como ganador del primer lugar a “Colección Natural”. Para variar el segundo puesto de ese concurso lo ganó un alumno del Centro de la Imagen. Los ganadores obtuvieron tres mil dólares y mil quinientos dólares de los auspiciadores, respectivamente.
El que personas que hayan tenido relación o mantengan un vínculo laboral con el Centro de la Imagen ganen los concursos organizados por esta misma institución puede tomarse como una coincidencia. Sin embargo en ninguna parte del mundo, los concursos de valor nacional permiten que los participantes tengan relación laboral con la institución que organizan estos eventos.
Lo cuestionable también es que el jurado haya sido compuesto por el director del Centro de la Imagen, Roberto Huarcaya y dos profesores de esa institución. Lo cual le resta el aura de imparcialidad a este concurso y explica lo expuesto anteriormente. Es lógico que los jueces conozcan el trabajo de sus alumnos y de su colega ganadora. Los otros dos jurados fueron, la Consejera Cultural de la Embajada de Francia y un gran filosofo que además es un experimentado curador.
El mensaje que brinda este instituto de fotografía es claro, los formados en Centro de la Imagen ocupan los primeros puestos de los más importantes concursos nacionales. Los dos últimos de este tipo, organizados en menos de un año lo demostraron.
No habría cuestionamientos si el concurso Eugene Courret dejara la denominación de “nacional” para convertirse en un concurso institucional, donde participen solo los alumnos y ex alumnos del Centro de la Imagen. La profesora que fue nombrada con el tercer puesto del Courret en esta edición 2013 y con el primer puesto en el III Salón de la fotografía ICPNA 2012, por ética profesional, no debió concursar en ninguno, puesto que sabía que sus fotografías de “Colección Natural” serían calificadas por sus compañeros del su mismo centro laboral.
Se acercan dos concursos de categoría nacional, y por supuesto que cuentan con auspicios muy atractivos de empresas privadas. Uno es el Lima Photo, organizado por el Centro de la Imagen. Que desde el saque define las bases de manera subjetiva: “el objetivo del mismo es apoyar las nuevas manifestaciones fotográficas internacionales”. Para variar, el director y profesor del Centro de la Imagen, Roberto Huarcaya, figura como uno de los tres jurados. El premio para el primer puesto será de 3,500 dólares y 1500 para el segundo. La empresa Repsol, quien aporta este dinero, debería estar atenta que su nombre no se empañe con las críticas que podrían llegarle de volver a repetirse el escenario del último premio Courret.
El otro concurso de categoría nacional, es el que organiza la Asociación de Fotoperiodistas del Perú (AFPP). Conozco a muchos de los miembros que componen esta entidad y espero que logren llevar a cabo un concurso con la mayor imparcialidad posible, que no cometan los errores de la organización del Courret y que la AFPP se gane un lugar de respeto entre las instituciones que auspician y apoyan el surgimiento de la fotografía en el Perú. Lo que aún no se sabe de este promocionado concurso es el nombre de sus jueces. Espero con paciencia la nómina.