Por Edison Mamani
En mi columna “Petroperú y el Congreso: guerra fría entre la derecha y la izquierda”, hace tres semanas, habíamos señalado que Diego Bazán, de Renovación Popular, estaba impulsando una moción censura contra el ministro José Arista, por el tema de Petroperú, pero que no tenía el apoyo del Congreso, ni siquiera para presentar la moción. El miércoles 16 de octubre, se debatirá y votará una moción de censura contra el ministro de Economía, impulsada por Perú Libre, ideología totalmente opuesta, y donde el motivo ya no es Petroperú sino los derechos laborales, sin embargo, se tiene el apoyo de Renovación Popular. A pesar de lo anterior, nuestro pronóstico se mantiene, porque no se cuenta con los 66 votos.
Analicemos la moción de censura presentada por Perú Libre. Los motivos son los derechos laborales de los trabajadores estatales, la pobreza, la salud y las obras paralizadas. No se menciona en ningún lado a Petroperú y, a pesar de ello, se ha recibido el respaldo de Diego Bazán y Renovación Popular. Cabe resaltar que cuando se llevó a cabo la interpelación del ministro el 14 de junio, esto fue producto de la aprobación de dos mociones de interpelación, una de ellas era promovida por Diego Bazán, donde sí se cuestionaba la actitud del Gobierno sobre Petroperú: la izquierda sí pudo continuar con la segunda etapa del control político, pasar de la interpelación a la censura, pero la derecha no, solo se limitó a firmar un texto enteramente escrito por la izquierda.
Ahora veamos las 35 firmas: 8 de 11 de Perú Libre (faltan Waldemar Cerrón, Abel Reyes y Milagros Rivas), 8 de 10 de Renovación Popular (faltan Cheryl Trigozo y Jorge Zeballos), 6 de 8 de Juntos por el Perú (faltan Jorge Coayla y Elías Varas), 4 de 5 de la Bancada Socialista (falta Alfredo Pariona), 3 de 10 de Acción Popular (solo han firmado Luis Aragón, Hilda Portero y Elvis Vergara), 2 de 8 del Bloque Magisterial (solo han firmado Lucinda Vásquez y Oscar Zea), 2 de 14 de Podemos Perú (solo han firmado Heidy Juárez y Edgar Tello), 1 de 8 de Avanza País (solo ha firmado Edward Málaga), y la no agrupada Margot Palacios.
No hay ninguna bancada que haya firmado en bloque. La derecha solo representa el 26% de las firmas (9 de 35). Alejandro Cavero, de Avanza País, que abiertamente se ha mostrado en contra del ministro por su accionar sobre Petroperú, tampoco ha firmado, me imagino porque en la moción no se dice nada de esta empresa estatal. Llama la atención que nadie del Bloque Democrático, sector progresista, haya suscrito la moción de censura, lo que no necesariamente implica que no votarán a favor.
¿Y el resto de las bancadas? Han estado en silencio en estas tres últimas semanas, lo que implica que la correlación de fuerzas no se ha movido. En todo caso, en el supuesto que se sumen más votos, igual no van a poder llegar a los 66, porque eso depende en la práctica de Alianza para el Progreso, por ser de centro, y Fuerza Popular, por ser la más numerosa, pero la primera es la principal bancada oficialista, y la segunda si bien no se ha pronunciado, su vocero Arturo Alegría ha adelantado una actitud de desgano frente a la censura, deslizando que no es el momento adecuado porque nos encontramos ocupados con el tema de la inseguridad ciudadana.
En conclusión, la derecha cuestiona lo de Petroperú, y la izquierda los derechos laborales, entre otros, pero ambas bancadas Renovación Popular y Perú Libre, son catalogadas de extremistas, por lo que es difícil que haya un consenso para conseguir los 66 votos. Tener en cuenta que algunos parlamentarios de la derecha estaban esperando la designación del presidente de Petroperú para justificar la censura porque al parecer el posible titular no sería cercano a su ideología.
Recordar que en la derecha hay una relativa resignación a la postura del Gobierno sobre Petroperú: “¿En qué situación pierde más el país? Nos cuesta más dejar morir a Petroperú, y tenemos que apostar por darle la liquidez para que salga adelante” (palabras de José Arista).