Actualidad

Cecilia Cebreros, esposa del penalista César Azabache, sigue como asesora de la Fiscal de la Nación

Un serio conflicto de intereses: una funcionaria pública no puede tener como pareja a un abogado que tiene varios casos en las fiscalías, entre ellos un millonario caso contra el Estado peruano: Brookfield le reclama al Perú US$ 2,700 millones.

Published

on

Hace un mes, el portal El Foco informó sobre un hecho que se encontraba oculto: “La fiscal de la Nación, Delia Espinoza, tiene como asesora de imagen a Cecilia Cebreros. La comunicadora es pareja del conocido abogado penalista César Azabache, quien defiende a investigados por el propio Ministerio Público”.

La noticia en mención mostraba un clarísimo y serio conflicto de intereses, sin embargo, el asunto sigue en silencio a pesar de que quedó al descubierto una situación de privilegio para el penalista César Azabache Caracciolo, quien tiene varios clientes investigados en diferentes fiscalías. Azabache ha conseguido el sueño de todo penalista: que su esposa trabaje al lado de la Fiscal de la Nación, la autoridad que tiene el mando sobre todos los fiscales.

Serenata en casa. César Azabache y su esposa Cecilia Cebreros.

Sin duda, tener a la esposa, día a día, al lado de la Fiscal de la Nación y con acceso a información privilegiada, es un buen argumento para que Azabache capte clientes empresariales como los hermanos Wong o la cuestionada firma Brookfield en el caso Rutas de Lima,  investigados por presunto lavado de activos.

La pregunta es ¿por qué el Ministerio Público guarda silencio ante un caso de flagrante conflicto de intereses?

¿Quién es Cecilia Cebreros Apaza?

En su perfil de Linkedin se presenta como una profesional senior de Comunicaciones, con una maestría en Dirección de Comunicaciones y como una “experta en diseño de estrategias de posicionamiento con enfoque reputacional y experta en campañas de comunicación”. Como el defecto de Linkedin es que permite el autobombo, consultamos a diversos profesionales y resulta que, en el ambiente profesional donde dice ser experta, Cecilia Cebreros es una desconocida. Un conocido Head Hunter no la registra y varias agencias de comunicación desconocen su trayectoria y no se conoce de ningún caso importante donde haya demostrado ser una experta.

En los hechos, parece haber intentado, sin éxito, ser una pequeña empresaria al crear en el año 2012 “El Hadita Lima” para la elaboración de “productos alimenticios”. Al parecer su hadita no la protegió y entonces, un año después, Cebreros, la emprendedora, intentó otra ruta creando la “Asociación Antorcha Comunicadores”, en la cual se autonombró como Presidente. Esta asociación dijo dedicarse a un rubro casi hollywoodiense: la producción y distribución de películas y videos. Pero, la antorcha no prendió y la asociación duró apenas un año, pues, se encuentra en condición de baja de oficio ante la Sunat desde el año 2013. Al parecer, Cecilia Cebreros Apaza no se dio cuenta de un pequeño detalle: no es negocio distribuir películas en un país que no va al cine y tampoco funciona la distribución de videos en un país con alta piratería.

La pareja de esposos en pleno crepusculo.

No obstante, la hoy jefa de comunicaciones de la Fiscalía de la Nación, tiene cierta terquedad porque insistió en sus fallidas aventuras empresariales y trató de encender su “Antorcha Comunicaciones” el año 2014 pero en otro rubro complicado: la edición de libros y folletos en un país que no lee. El resultado fue otro fracaso empresarial y desde el año 2016, la Sunat registra la baja de oficio de la citada empresa.

Entonces, Cecilia Cebreros Apaza, la esposa del abogado penalista César Azabache y actual asesora de la Fiscal de la Nación Delia Espinoza, se olvidó del sector privado que exige capacidades y talento, y giró hacia el sector estatal, ámbito en el que ha sobrevivido dando saltos de un lugar a otro cual profesional versátil que parece conocer todos los rubros.

En efecto, entre el 2019-2020 fue Jefa de la División de Comunicaciones de la Sunat. ¿Quién era ministra de Economía y Finanzas? María Antonieta Alva, cliente de ¿quién? del penalista César Azabache. Cabe precisar también que Azabache era consejero legal de Jorge Alva Hurtado, padre de la ex ministra y amigo cercanísimo de Martín Vizcarra, conforme lo informó en su momento, América Televisión.

Luego, el año 2022, Cecilia Cebreros reapareció como jefa de la Oficina de Comunicaciones e Imagen Institucional de Proinversión, durante el gobierno de Pedro Castillo. La caída de Castillo no la afectó porque en la gestión de Dina Boluarte, fue designada como Directora Ejecutiva de la Oficina de Información Pública del Ministerio de Salud el 22 de marzo de 2023. Allí trabajó con la cuestionada ex ministra de Salud, Rosa Gutiérrez Palomino, acusada por desaparecer del cargo para hacerse una liposucción en plena epidemia del dengue que originó 200 muertes.

Como puede verse, Cecilia Cebreros de Azabache, ha tenido un buen ángel de la guarda para transitar en poco más de seis años por la SUNAT, PROINVERSION y el MINSA hasta llegar, actualmente, al rubro judicial como asesora de imagen de la fiscal de la Nación, Delia Espinoza.

El problema es que la esposa de un abogado penalista no puede estar en la Fiscalía de la Nación con acceso a información privilegiada y a diversos contactos. ¿Qué harán las autoridades del Ministerio Público? ¿Qué opinará el penalista Azabache? Por lo pronto, su esposa, según fuentes a las que hemos accedido, ya lo sabe pero dice muy risueña: “No va a pasar nada”. ¿Por qué está tan segura?

Comentarios
Click to comment

Trending

Exit mobile version