Capriles y los presos contra Hugo Chávez

CAPRILES Y LA ESTRATEGIA PARA GANARLE A HUGO CHÁVEZ

Escribe Diego Alonso García

Se acercan las elecciones presidenciales en Venezuela, los candidatos Henrique Capriles y Hugo Chávez realizan sus campañas cada uno a su estilo, pero me llamó la atención la nueva campaña emprendida por Capriles llamada “Cárceles en Positivo”, así que sin dudarlo me comunique con Carlos Alberto Nieto Palma, coordinador del grupo de trabajo en materia penitenciaria del plan de gobierno del candidato de oposición venezolano.

Carlos Alberto Nieto viene trabajando el tema penitenciario y la defensa de los derechos humanos de los recluidos desde hace muchos años en Venezuela, es un hombre reconocido en toda la región por su incasable labor en búsqueda de la reinserción de los liberados, lo conocí hace un tiempo debido a la labor que realiza con su ONG “Una Ventana a la Libertad” la cual tiene once años de labor a favor de los penados.

Lo que me llamó la atención como ex canero fue que un candidato presidencial al fin nos pusiera como parte de la población de la cual se requiere atender sus demandas, si bien es cierto los presos en ninguna parte del mundo votan, pero los familiares son una población la cual ningún candidato ha tomado en consideración antes, ahora comienza un nuevo cambio en la política de la región, preocuparnos por los que menos posibilidades tienen y requieren de mayor atención.

Al conversar con Carlos Alberto me di cuenta que la intención de Capriles es generar un cambio no solo en la labor intramuros sino también en la labor del liberado, aquel que luego de pasar tantas noches en el penal sin saber cuando llegara su libertad, se ve de buenas a primera en un ambiente hostil, el cual lo discrimina y margina por su condición de ex recluso.

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Capriles plantea un sistema de reclusión digno, sin hacinamiento ni sobrepoblación penitenciaria, una reforma del sistema judicial, acelerando los procesos y evitando que los procesados se encuentren en eterna reclusión preventiva, cambiaran el sistema de tratamiento para que los penados puedan tener una verdadera capacitación laboral la cual permitirá tener un sustento de vida digno al salir y no vuelva a delinquir.

Carlos Alberto señala que están trabajando en alianzas con el sector privado, para que existan talleres en el interior de los penales, los internos que trabajen en estos talleres privados al salir de prisión continuaran trabajando en esas mismas empresas, lo cual asegurará una remuneración digna para que el interno no sienta la necesidad de volver a delinquir.

Actualmente se encuentran estudiando la manera de generar un sistema de vivienda para los ex internos, al consultarle sobre sí usarían el sistema de las casas de acogida y los sistemas de tratamiento de EE.UU y Reino Unido, Carlos Alberto señaló que están trabajando en un planteamiento propio, si bien es cierto usaran como base las experiencias de otros países de la región y de países en los cuales se tienen sistemas similares, quieren darle una visión propia, para una Venezuela nueva, donde el temor de la inversión privada disminuya, “ … la idea es construir un nuevo país (Venezuela), la idea es que vuelvan a creer.”, al referirse sobre la inversión privada en Venezuela y la labor en el interior de los penales.

Actualmente la población penitenciaria de Venezuela es de 45 mil internos, con un promedio nacional de familia de 4,3 significa aproximadamente 194 mil votantes, es una población relativamente chica si consideramos que se espera un porcentaje de 8 millones de electores, pero si consideramos a los ex internos la cifra puede subir hasta el millón de votantes, entre reclusos, ex reclusos y sus familiares, esto hace que el peso del voto sea aproximadamente del 10% de electores, lo cual se convierte en una cantidad considerable para tener en cuenta.

Espero que otros candidatos y gobernantes tomen como ejemplo el cambio de la política penitenciaria que está planteando el candidato Capriles, los presos y ex presos somos también seres humanos, que necesitamos ayuda, como dice la propaganda de Capriles, nuestra vida importa tanto como la de cualquier otro.