Una conversación “casual”. Durante su exposición ante la comisión de Relaciones Exteriores, el canciller Óscar Maúrtua, explicó el día de ayer que la reunión entre los mandatarios de Perú y Venezuela, se produjo de manera “espontánea”, ya que no se tenía prevista su presencia en la cumbre de la Celac realizada en México. Agregó que estos tipos de eventos son propicios para encuentros informales.
“La presencia de Maduro no estaba prevista, pues la presidencia de ese país había informado que iría la vicepresidenta, su presencia causó la reacción de varios países, como la salida de la vicepresidenta de Colombia. Por eso no tenía previsto en la agenda reunirse con Maduro”, explicó el canciller Maúrtua de Romaña.
“Este encuentro se dio tomando en cuenta el principio de relaciones amistosas entre los países y en los márgenes de la reunión plenaria de la cumbre de la Celac que, como todo espacio multilateral, es el lugar no solo para generar reuniones previamente establecidas, sino también para reuniones espontáneas que promueven intercambios de opiniones y negociaciones de pasillo. Cabe recordar que Castillo asistió invitado por el presidente de México junto a otros 17 jefes de Estado miembros de la Celac”, agregó el canciller.
Asimismo, dio detalles sobre el encuentro que sostuvieron Pedro Castillo y Nicolás Maduro, manifestando que se abordó el tema del retorno de migrantes venezolanos que viven en el Perú, así como la posible adquisición de productos peruanos por parte de ese país.
En cuanto a las relaciones del Perú y Venezuela, el ministro de Relaciones Exteriores señaló que en ningún momento se han roto relaciones con este país. Además, reiteró que el Estado peruano apoya y supervisa los acuerdos que se han conseguido entre el gobierno ilegítimo de Venezuela y la oposición, los cuales vienen llevándose a cabo a en México.
Detalló que, incluso, el Perú se ha ofrecido como sede alterna para estos encuentros de paz, los cuales tienen por objetivo conseguir una salida democrática a la crisis que vive Venezuela.