La mente psicópata de una maquinaria sangrienta que se ha extendido por distintos países de Sudamérica se encuentra en libertad luego de haber escapo del penal de Tocorón, en su natal Venezuela, y estaría buscando un nuevo centro de operaciones ya en otro país para continuar con los asesinatos, extorsiones, trata de personas, y cualquier otro delito imaginable. El Perú apunta como su nuevo refugio pues aquí se encuentra asentada desde hace varios años un fuerte contingente del ‘Tren de Aragua’.
El temible líder de esa organización criminal, Héctor Rusthenford Guerrero Flores, conocido internacionalmente como ‘El Niño Guerrero’, ya se encontraría en suelo peruano, según manifestó un periodista venezolano.
Fuentes a las que tuvo acceso Latina manifestaron que por información a la que tienen acceso, saben que al momento que la Policía irrumpió en el penal, ‘El Niño Guerrero’ ya no estaba en Venezuela. Estaría oculto en Colombia o el Perú, donde el Tren de Aragua opera con total impunidad.
Según esta fuente, los integrantes del Tren de Aragua tienen total libertad para salir e ingresar a su país, mientras que un ciudadano común y corriente de Venezuela tiene que realizar varios trámites para salir de su país.
Por su parte, equipos de inteligencia de la Policía del Perú se encuentran desplegados en la zona de frontera para impedir el ingreso a territorio nacional del ‘Niño Guerrero’. Así lo dio a conocer el comandante general de la Policía Nacional del Perú (PNP), general Jorge Luis Angulo Tejada, en una entrevista con Radio Nacional.
“La acción y reacción es inmediata, tenemos equipos de inteligencia, equipos de fotografía allá en la zona de frontera, de tal manera que podamos advertir cualquier movimiento extraño que pueda impedir el ingreso de este sujeto”, indicó la autoridad.
Breve biografía del ‘Niño Guerrero’
Héctor Guerrero es uno de los principales cabecillas de la banda criminal el ‘Tren de Aragua’. El individuo nació en Maracay, Venezuela, en diciembre de 1983. Su trayectoria delictiva comenzó temprano, ya que a los 17 años era señalado como micro comercializador de drogas y enfrentó una serie de denuncias por agredir a efectivos policiales.
En 2012 logró escapar de la prisión, pero al año siguiente fue capturado en el estado de Lara, donde estaba involucrado en asaltos a viviendas. A pesar de su reclusión desde entonces, en 2015 se le vio durante una fiesta realizada en el barrio de Maracay, que en ese momento estaba bajo el control del Tren de Aragua.