Gastronomía

Butifarra limeña: el sánguche estrella del siglo XXI

¿Cómo nace uno de los sánguches clásicos de Lima? Un breve viaje por la historia de nuestra gastronomía.

Published

on

Durante la invasión de américa los españoles introdujeron la carne de cerdo a nuestro territorio que era conocido como las Indias. Y a partir de la crianza del ganado porcino en el nuevo mundo, se introdujo también el jamón serrano, que posteriormente fue adaptado y fusionado con nuestras propias recetas. Entonces, surgieron dos nuevas creaciones: el jamón del norte, y el jamón del país. A partir de ese momento en Birú, que luego fue llamado Perú nació la Butifarra (del catalán botifarra), que en la época del virreinato ya era tradicional en el aristocrático barrio de “Bajo el puente”, ahí al costado del Río hablador (hoy distrito del Rímac).

En 1766 se inauguró la plaza de Toros de Lima, mejor conocida como plaza de Acho, y para la primera fiesta brava, se vendía a veinte pesos la cerveza, que venía acompañada de una suculenta butifarra que llevaba filetes de jamón del país, con una hoja de lechuga fresca, cebolla, rabanitos y tiras de ají amarillo.

Posteriormente, aquel fiambre se hizo tan popular en las chinganas y en las callejas del Damero, que los butifarreros las pregonaban a viva voz. Ya en el siglo XX, precisamente desde 1905 las famosas butifarras se ofrecían en los bares tradicionales del centro de Lima; y hasta nuestros días, pocos lugares continúan con la tradición; no obstante, aún se pueden encontrar las mejores butifarras en El Cordano, El Chinito (el del jirón Chancay, y no las sucursales), Palermo Café, la Taberna Queirolo (la de Pueblo Libre), El San Antonio (panadería), y el Juanito de Barranco.

Apostilla.-  La receta tradicional de la Butifarra peruana consiste en filetes y/o trozos de Jamón del país servidos en un crocante pan francés con una hoja de lechuga de seda, acompañados de la tradicional sarsa criolla, con tiras de ají amarillo y ají Limo.

Comentarios

Trending

Exit mobile version