Apenas el 18 de mayo último, el nuevo ministro del Interior Juan José Santivañez visitó el Centro de Control De Operaciones de Barranco y tras sostener conversaciones con la alcaldesa Jessica Vargas y prometer trabajar juntos para luchar contra la criminalidad, posaron para la foto de rigor para su posterior promoción.
Jessica Vargas posando para la foto con el actual ministro del Interior Walter Ortiz, Juan José Santivañez.
Anteriormente, el 21 de abril, la alcaldesa también se había reunido con el anterior ministro del Interior Walter Ortiz y también posaron para la foto.
Jessica Vargas posando para la foto con el exministro del Interior Walter Ortiz.
Lo cierto, es que ni el mencionado premio otorgado por la ONG CIT, ni las dos reuniones sostenidas con dos ministros del Interior, han logrado que el distrito de Barranco sea un distrito seguro. Porque todos los días, ocurren asaltos y arrebatos, como el robo ocurrido en la tienda Tambo que está frente a la estación Unión del Metropolitano, entre otras incidencias.
Asimismo, otras zonas del distrito brillan por la ausencia del patrullaje. Es decir, no existe un real control en Barranco. Mientras que el área de fiscalización interviene a los pequeños emprendedores, en la plaza Butters durante las noches, en las calles aledañas los cuidadores de autos, prácticamente extorsionan a los visitantes y les cobran sumas exorbitantes para cuidar los vehículos. Y a pesar que se genera una tremenda contaminación sonora a inmediaciones de una conocida discoteca, la comuna no fiscaliza esa zona. Eso sin contar el tradicional Boulevard que está plagado de discotecas que generan grandes ruidos.
Ayer, luego de haber asaltado y baleado al cambista de dólares en la avenida Grau, en las redes sociales se hablaba que el famoso plan cerco había dado sus frutos; sin embargo, uno de los delincuentes de nacionalidad venezolana mientras huía, pasó por las narices de la comisaria de Barranco, y se escondió en una vieja casona ubicada en la 2da cuadra de la avenida San Martin, casi al frente de la comisaria. Y de no haber sido por un vecino que habita en la casona y que avisó a la policía; quizá ese criminal habría escapado.
Delincuente venezolano mientras huía pasó por la comisaria y se refugió en una vieja casona.
Si bien, la alcaldesa Jessica Vargas encarga repartir en todo el distrito, un periódico institucional “El Barranquino” para promocionar a los vecinos de Barranco, que el distrito se ubica en el top 6 de los distritos más seguros de Lima; eso no es suficiente y solo es una mención teórica, que en resumidas cuentas no se condice con la realidad.
Publicación de la Municipalidad de Barranco que promociona al distrito como uno de lo más seguros.
En suma, los vecinos barranquinos están preocupados y molestos, porque más allá de querer ver publicidades y anuncios con “grandes planes para combatir a la delincuencia”, ellos desean una gestión seria y que realmente tome acciones concretas, porque de otra manera, la delincuencia en este distrito tradicional y turístico sin duda ganará más terreno hasta llegar a ser incontrolable.