Bangkok Nites, el nuevo filme de Katsuya Tomita y Terutaro Osanai, estrenada en el festival de Locarno, sugiere un relato de diversión etílica y de acción. Pero la resaca de esta coproducción franco-tai-lao-japonesa es dura. En 180 minutos muestra desde las perspectivas de un turista japonés y de prostitutas tailandesas las distintas trampas de la industria del turismo.
Aunque la perspectiva del turista sexual japonés enamorado no es nada innovadora, Katsuya Tomita opta por el turista como espejo a través del cual nos adentramos en un pueblo y los orígenes históricos de su sometimiento y cuya miseria alimenta la industria del turismo sexual. Pero Bangkok Nites es más: Cada actor –aficionados todos excepto el protagonista japonés– nutre su personaje con reflexiones propias.
El relato se estructura mediante viajes, el del turista japonés hacia Laos a través de Tailandia oriental, y aquellos que hacen las mujeres de Isaan a la capital, si se les brinda la oportunidad a ser prostituidas. Para así luego, durante las vacaciones en su pueblo natal, disimular con pompa y objetos de lujo la denigración de la que son objeto, aumentando así un círculo vicioso.
Pero entre sueños rotos, situaciones absurdas y discursos de sometimiento colonial decadentes –vociferado por turistas ebrios e insolventes– se manifiestan formas de resistencia y persistencia: La música, de todos los géneros y épocas y con sonidos para todos los sentidos.
En la capital, que con brillo lujoso nubla los sentidos del visitante, lucen las prostitutas y proxenetas sus finas y rudas maneras de robar. En el campo, determinado por la ardua labor agrícola, las costumbres del pueblo y las añoranzas de varones que ven su amor perdido en la capital, se despierta el deseo de poseer algo para distinguirse, acercarse al modo de vida de los ricos, los capitalinos.
“No money, no life” – Las prostitutas que comparten quejas sobre clientes, la miseria que podría explicar los motivos para que abuelas decidan ofrecer sus nietas; todo permanece extrañamente distante entre hermosos paisajes, surcos de campos de arroz, cráteres de explosiones y pistas de aterrizaje de una antigua guerra secreta en Vietnam, en Laos.
Bangkok Nites se estrena en cines en Francia en noviembre.