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Atención consumidor: Indecopi ordena el retiro de tres productos que habrían superado el límite de grasas trans artificiales

Se trata de los bimboletes marmoleados (Bimbo), el panetón Bell’s, y el Cheese tris de la marca Frito Lay.

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En el año 2009 la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomendó que el consumo promedio de las denominadas grasas trans artificiales sea en promedio menor al 1% del aporte energético alimentario diario. En la actualidad, muchos productos ofrecidos al mercado, como los snacks o panqueques y sus semejantes, contienen un pequeño porcentaje de grasas trans, perjudiciales para salud del consumidor final.

De acuerdo a la OMS, la cantidad de calorías recomendadas al día está entre las 2.000 y las 2.500 pero la cantidad máxima recomendada de calorías procedentes de la grasa trans no debe de ser más de 20 a 25 calorías al día. Como cada gramo de grasa aporta 9 calorías, la ingesta total de grasa trans no debe de ser más de 2,5-3 gramos al día.

Es debido a ello que la Comisión de Protección al Consumidor N° 3 del Indecopi (CC3) ha impuesto una medida cautelar, ordenando el cese y comercialización de los productos Bimboletes marmoleado de la marca Bimbo, Panetón con pasas y frutas confitadas, de la marca Bell’s; y Cheese Tris de la marca Frito Lay que contendrían grasas trans en una cantidad superior a la establecida por la normativa vigente como es el Decreto Supremo 033-2016-SA.

La decisión tomada con voto en mayoría ordenó a los proveedores Panificadora Bimbo del Perú Sociedad Anónima, Orindale Properties Perú S.A.C., Supermercados Peruanos S.A. y Snacks América Latina S.R.L., comunicar los productos observados a todos sus distribuidores y/o comercializadores, incluyendo a quienes realizan ventas online.

Asimismo, la resolución exige que, en el plazo de siete días hábiles, los cuatro proveedores publiquen, mediante su página web y redes sociales, de tenerlas, la orden contenida en la medida cautelar, para que todos los consumidores puedan conocer el mandato.

También se ordena a las empresas que, en un plazo máximo de treinta (30) días hábiles, contados a partir del día siguiente de notificada la resolución, cumplan con retirar todas las unidades del producto observado que han sido colocadas en el mercado a través de sus diferentes canales de distribución y/o comercialización. 

Las empresas cuentan con un plazo máximo e improrrogable de cinco (5) días hábiles, contados a partir del vencimiento de todos los plazos otorgados, para remitir a la Comisión los medios de prueba que acrediten el cumplimiento de lo ordenado. 

Como se sabe, según lo dispuesto en el artículo 6 del D.S. 033-2016-SA, para el caso de los productos que contengan grasas trans de origen tecnológico diferente de la hidrogenación parcial, la Autoridad de Salud únicamente otorgará la autorización correspondiente, a los productos que no superen el límite de contenido de grasas trans: 2g de ácidos grasos trans por 100 g o 100 ml de materia grasa de manera excepcional, a fin de que permita gradualmente su eliminación conforme al avance tecnológico.

¿De dónde provienen las grasas trans?

Las fuentes de los ácidos grasos trans son dos: natural y artificial o industrial. La fuente natural proviene de los animales rumiantes, como la vaca, la oveja o la cabra. Las bacterias del rumen de estos animales realizan una hidrogenación parcial de una parte de los ácidos grasos oleico (monoinsaturado), linoleico y linolénico (poliinsaturados) que se encuentran en las hojas, tallos y raíces que comen, así como del contenido en los piensos. Estos ácidos grasos trans se absorben y se incorporan a los músculos y a la leche de los animales y por esta razón se encuentran, aunque en pequeña cantidad, en la carne de vaca, cordero y cabrito, así como en la leche entera. Aproximadamente un 5% del consumo total de ácidos grasos trans provendría del consumo de grasa de rumiantes (a través del consumo de productos como la mantequilla, crema, nata, leche entera, carne grasa, etc.).

La fuente industrial de ácidos grasos trans ocurre al hidrogenar parcialmente los aceites vegetales. El proceso consiste en añadir hidrógeno a presión en presencia de níquel, un metal que se utiliza como catalizador de la reacción. Si la hidrogenación es total se forma una grasa saturada, pero si la hidrogenación es parcial se produce una mezcla de ácidos grasos saturados, monoinsaturados y poliinsaturados cis y trans. Los alimentos horneados como galletas, bollería industrial, alimentos precocinados, snacks y los fritos como patatas fritas, maíz, y otros aperitivos, junto con los helados, cremas y batidos son los alimentos que contienen grasas trans en mayor cantidad.

Una vez consumidos, los ácidos grasos trans se absorben por el aparato digestivo y pasan a la sangre. Se incorporan a la membrana de las células donde sustituyen a los fosfolípidos, que normalmente son las grasas que componen las membranas celulares y éstas pierden o disminuyen su flexibilidad y fluidez, por lo que otras moléculas, como las del colesterol, no pueden acoplarse a la membrana y quedan libres, aumentado los niveles de colesterol en sangre. Además, aumentan la formación de ésteres de colesterol que son causantes del desarrollo del proceso de aterogénesis.

Con información de un artículo elaborado por María Elisa Calle, profesora titular del área de Nutrición, Medicina Preventiva y Salud Pública y delegada del Decano para Nutrición Humana y Dietética Facultad de Medicina. Universidad Complutense (Madrid).

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