Una mancha que no se borra fácilmente. A casi dos años del mayor desastre ecológico en el litoral peruano, la firma internacional de abogados Pogust Goodhead alista una demanda colectiva contra la empresa Repsol por la pérdida de miles de puestos de trabajo tras el derrame de crudo en el mar de Ventanilla ocurrido el 15 de enero del año 2022.
De esta manera, la firma legal con base en el Reino Unido tiene la intención de solicitar compensaciones por los perjuicios ocasionados a raíz del vertido de petróleo ocurrido en la refinería La Pampilla. Sin embargo, la compañía petrolera con matriz en España afirma haber indemnizado al 98% de los afectados registrados en el listado oficial.
El proceso se inició el 3 de noviembre con la recolección de firmas de pescadores artesanales, comerciantes y residentes de las áreas afectadas, desde Ventanilla hasta Chancay. Tom Goodhead, director ejecutivo de la firma especializada en conflictos medioambientales con sede en Inglaterra, llegó la semana pasada al país para conocer de primera mano los testimonios de aquellos que perdieron sus medios de subsistencia debido a la contaminación.
Cabe mencionar que esta es la misma empresa que en el 2018 presentó una demanda colectiva en el Reino Unido con 200 mil firmas contra la minera angloaustraliana BHP, responsable del vertido de casi 40 millones de metros cúbicos de residuos minerales debido a la rotura de un dique en Minas Gerais, Brasil, considerado uno de los peores desastres ambientales en la historia de ese país.
“Repsol dice que ya indemnizaron a la gente, pero solo lo hicieron con una pequeña porción y con montos mínimos, casi irrelevantes para el tamaño del impacto. Lo que han intentado es interceptar a las personas y evitar que puedan articular la defensa de sus derechos», declaró Tom Goodhead para el diario El Comercio.
Es así que la demanda será presentada en enero del año venidero ante la corte distrital de La Haya, en Países Bajos, donde la empresa Repsol tiene su domicilio legal.
Como se recuerda, a principios del año 2022 se produjo la ruptura de una tubería en la refinería La Pampilla. El derrame de crudo afectó a la biodiversidad y áreas protegidas de la zona; se estima que se vertieron al mar cerca de 12 mil barriles de petróleo.