Jano Burmester tiene 34 años, es uno de los jóvenes cineastas más talentosos del cine nacional, ha realizado los cortometrajes Work, Marcelita y Regreso, que lo llevó por varios festivales en el mundo, entre ellos el Festival de Cannes en Francia. Ha ganado premios a mejor cortometraje y mejor música. Recientemente participó en el Talent del festival de cine BAFICI en Buenos Aires, y actualmente trabaja en la filmación de su largometraje Hogar, un documental con el que desea cerrar la temática familiar.
Burmester es un cineasta que no busca el éxito comercial; lo que le interesa es solo hacer cine, así su pasión no le retribuya un ingreso económico.Actualmente se encuentra trabajando en su documental Hogar, un filme que desarrolla con más de 500 fotografías y 20 rollos de películas de los años setenta. Llegué hasta su casa donde me esperaba entre archivos, siempre atento y muy apasionado para hablar de cine. Mientras revisaba cientos de slays, él acomoda el proyector y el ecran en su sala para mostrar sus archivos.Lo que vi fue un tesoro familiar, hermosas imágenes a colores, fotografías que su padre había registrado viajando por el mundo en un submarino desde los años sesenta.
Jano, acabas de regresar de Buenos Aires, donde participaste en el Talent de BAFICI ¿Cómo ha sido esta experiencia?
Ha sido increíble, éramos como sesenta cineastas y también productores, sonidistas, directores de fotografía, y directores de sonido, eso era lo interesante, todo tipo de profesionales seleccionados bajo una curaduría del Berlinale, que es como el festival madre, y este era el Talent Campus Buenos Aires, la selección sudamericana.Lo interesante es que ibas a tres talleres, tú presentabas tu proyecto, e ibas a montaje o edición o taller de sonido, o a taller de desarrollo, en mi caso con el proyecto Hogar, que fue el documental que presenté y que vengo trabajando en desarrollo, nos seleccionaron para el taller de sonido, entonces pudimos alucinar la música y el sonido de la película de una forma profesional, y con otro tipo de colegas entre sonidistas y productores que pueden ver la película de otra forma y te dan otra devolución.
¿Con gente de qué países compartiste esta experiencia?
De Argentina, Uruguay, Paraguay, Brasil, Colombia, Venezuela y Bolivia, de Perú éramos dos.
¿Con quién más estabas?
Con Víctor, José Manuel Checa Belaunde, y Johnny Orozco. Y había uno más que era de prensa, Jaime Akinomi, o algo así, no recuerdo. Y había otra selección de prensa Talen Impress.
¿Es la primera vez que participas en algo así?
De esa magnitud, sí; yo había postulado al Berlinale, al talent Berlín, y no salí, y también hace un año había postulado al talent Buenos Aires, y tampoco salí, este fue el tercer año que postulo y recién voy.
¿Dónde te agarró la noticia de ser seleccionado?
Creo que estaba grabando algo en Telefónica con un amigo y me llegó el mensaje por internet, y la verdad que fue increíble ser seleccionado porque mi película Hogar es una película que necesita coproducción europea, entonces creo que llegar a ese lugar era importante para poder conocer a otras personas, entre productores de Alemania, yo conocía algunas personas pero todavía no he concretado la coproducción, pero era un paso; entonces sigo preparando el proyecto. Hogar está en desarrollo todavía, y estoy tratando de filmar el teaser para poder presentar en la web un material más o menos final de cómo sería la película, y seguimos postulando para conseguir el capital para poder filmar.
¿Te quedaste satisfecho con el camino que recorrió tu cortometraje Regreso?
Claro. Fue súper, en verdad era lo primero que yo hacía, y hasta ahora no he podido superarlo, es decir:hasta ahora no he podido conseguir tanta plata para hacer algo, porque fue lo primero que hice y, gracias a Dios, me dieron la posibilidad de visitar varios festivales; la película viajó más que yo, obviamente, pero haber ido a Cannes, haber estado en Crermun Ferrand, haber ganado en Brasil, y en Perú ganó todo: el Conacine, el premio de Festival de Lima, por música y mejor ficción en Brasil, etc. Ahora, recién con Hogar, que es un largometraje, he ganado el TalentDoc el año pasado organizado por el Goethe Institute, después la beca al TIPA, hemos ido también al TalentDoc Buenos Aires, hemos recibido la tri Beca Fundation, hemos hecho un taller con Tri Beca, y lo último es que hemos ido al Talent Campus de Buenos Aires.
Hay alguna presión, por el hecho de que tu próxima película tiene que ser mejor o igual que Regreso…
No presionado, yo siento que cada película es distinta y Regreso necesitaba y requería toda esa preparación, que duró seis años, en los que estuve escarbando y escarbando, y creo que yo era otra persona también, y como que había pasado tanto tiempo y no lo podía hacer y llegaba el momento porque ya había terminado de estudiar cine, y tenía otra energía. Ahora es distinto, es una película que viene siendo filmada mucho antes que yo haya nacido, para mí es importante esta entrega, porque, digamos que con esta película yo ya cierro las películas familiares, Regresohabla de la casa, Hogar habla de mi familia, Marcelita habla de mi tía, es todo ese núcleo del hogar, de la familia, y de la casa. Con esas películas yo ya termino, y salto el siguiente paso de otro tema que es la ficción nuevamente.
Ahora con este documental Hogar que estás desarrollándolo, hay una cosa interesante, es más íntima y vas a caminar por lugares minados, sentimentalmente hablando.
Exacto. Es más, cuando fui al TIPA uno de los asesores fue el cineasta argentino Rodrigo Moreno, y me habló sobre eso, de que le pierda miedo al filmar esto , y tengo que filmarlo sin temor alejándome un poco de la película y con valentía, cosa que me ha costado mucho porque a veces esta película es tan personal que hay momentos tan emotivos en que empiezas a llorar, o empezamos a llorar ambos, y ese temor del llanto, de presentarlo o no presentarlo, ¿qué hago? Yo preferiría no presentarlo pero después decía alejándome, allí está, en ese llanto están las palabras que no se dicen, y tengo que estar preparado, y todo ese tiempo es la preparación y la búsqueda.
Después de ver todo el material fotográfico y video realizado por tu padre, la pregunta es ¿habido intencionalidad por parte de tu padre en filmar algo con esto este material?
Esa es un poco la pregunta del documental. De hecho me pregunto quién soy, hacia dónde voy, pero también me pregunto por qué mi padre regresa a Lima después de haber estado ocho años fuera, por qué filmó estas imágenes. Estas imágenes yo las encuentro como si fuera un tesoro, éste material ha sido filmado mucho antes de que yo naciera. Son más las preguntas que se generan a través de esas imágenes que las respuestas que obtengo, y creo va por allí lo fuerte de este documental, y además son imágenes que están conservadas íntegramente.
Estamos hablando de más de 500 fotografías y 20 rollos de películas. Tú padre era submarinista y viajaba por el mundo en un submarino.
Sí, viajaba bajo el agua. Entonces el mar en este documental tiene otra potencia, porque trato de explicar mi relación con el mar, porque mi padre y mi madre son del norte y vivieron cerca al mar. Lo curioso es que mi mamá le tenía miedo al mar y mi papá era submarinista. Entonces hay algo allí que yo he querido tratar de escarbar y encontrar. Y en este proceso encontrado que hay dolores, hay nudos, heridas y grietas. Dicen que la casa es la representación de la familia, y yo trato de encontrar dónde está mi hogar, yo no tengo casa ¿en algún momento tendré mi casa? ¿Lo formaré? También son las preguntas que me hago.
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