Esta nueva edición de uno de los concursos con mayor permanencia en el medio, además de promover y difundir la técnica de la acuarela, nos ofrece un panorama de su desarrollo a nivel nacional, dando a conocer jóvenes artistas y consolidando los trabajos de aquellos ya reconocidos. Junto a las obras ganadoras, se exhibe también una selección de los trabajos más destacados.
El premio del «43 SALÓN NACIONAL DE ACUARELA ICPNA 2015» ha sido para la obra de Christiam Nicolás López Aroni (Huancayo) con el políptico titulado Mi reconciliación no tiene memoria porque fue verdad, compuesto por 10 piezas en blanco y negro, que nos recuerdan aquellos años de la guerra interna. Cabe destacar que López Aroni ha sido además ganador del concurso de acuarelas John Constable del C.C. Británico del presente año.
La evaluación estuvo a cargo de los artistas Luz Letts y Jaime Higa y el crítico de arte Jorge Bernuy, quienes además otorgaron el segundo premio a David C. Villalba Quispe y el tercero a Berly Choque Huamanga, por sus obras Soy muchacho provinciano… Yo shi creo en ti y Meditaciones ancestrales,respectivamente. Las menciones honrosas fueron para los trabajos Hanan pacha,de Mónica Beatriz Ccalla Flores (Lima); Éxodo, de Kenneth Marcus Malásquez Esquerre (Lima); y Consumo de imagen, de José Luis Amezquita Huanqui (Arequipa).
En esta edición, en medio de una vasta convocatoria de más de doscientas obras provenientes de Lima, Ancash, Arequipa, Ayacucho, Huancayo, Huancavelica, Tacna y Puno, el jurado calificador seleccionó una muestra representativa del variado registro de la acuarela en nuestro país.
Para Luz Letts y Haroldo Higa, miembros del jurado «La acuarela es una de las maneras más antiguas de atrapar imágenes sobre papel. Es una técnica que requiere rapidez y paciencia. Su belleza está dentro de sus propiedades particulares que no se encuentran en cualquier otra técnica. La transparencia y el uso del fondo en la construcción del color ordenan de forma particular la ejecución de la composición».
Jorge Bernuy, parte del jurado calificador, en relación a la obra que ganó el concurso Mi reconciliación no tiene memoria porque fue verdad de Christian Nicolás López Aroni comenta: «pintada en blanco y negro en señal de duelo. Esta obra no es anecdótica ni cae en el sentimentalismo, en la retórica. No tiene miedo, pero sus ojos bien abiertos siguen estando heridos por el terror sufrido, por lo que sufren los de abajo».
La exposición se podrá ver en la Galería Juan Pardo Heeren hasta el 20 de diciembre de martes a domingo de 11:00 a.m. a 8:00 p.m. Ingreso libre.