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“………….DE CONCRETO” MADI

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«MADI» La Primera Vanguardia Latinoamericana

Por Abel Salazar

 

MADI, es un movimiento pionero del arte abstracto geométrico latinoamericano. Desde sus inicios fue polémico, constructivo, testimonial y sentó las premisas sobre cinetismo en Latinoamérica, además que promovió la síntesis de las artes con la arquitectura (obvia herencia bauhausiana).
MADI ¿acaso ma-terialismo di-alectico?, nace en 1946 en Buenos Aires. Es en sí un movimiento que reivindica al constructivismo ruso, en tanto también a la primera obra cinética de Naum Gabo y a toda la parafernalia geométrica acaecida y establecida en Europa en los años previos a este movimiento.
Las semillas del mismo se siembran en 1944 con la revista «Arturo» y al año siguiente con las dos exposiciones de «arte concreto-invención», en Buenos Aires. Años previos, Joaquín Torres-García (pintor uruguayo afincado en parís,1874-1949), y que pertenecía al grupo parisino «abstracción-creación» regresa a Sudamérica y difunde las ideas racionales que sorprenderán y calaran hondo en dos jóvenes creadores uruguayos: Rhod Rhotfuss y Carmelo Arden Quin.   A los que se suman pronto los artistas argentinos Gyula Kosice, de origen Húngaro y Martin Blasko, de origen alemán, más un grupo de jóvenes artistas visionarios como Stimm, Laan, Sabelli, Scopelli, Linenberg, Herrera entre otros.
MADI fue considerado como subversivo en sus comienzos. Todo razonamiento MADI ofendía al ortodoxo arte y a la conservadora sociedad Argentina de entonces.


Vista ya el legado racional europeo, es preciso recalcar la total libertad en el proceso de la creación de los artistas MADI.
Esto es, no regirse por normas que dicten precisas  y estrictas pautas creativas. Una de las principales características de los artistas MADI es el rechazo al rectángulo como formato para crear sus pinturas; en consecuencia consiguen una obra racional y dinámica con formatos poligonales, recortados, irregulares y de cromatismo plano.

En cuanto a la escultura MADI, esta debe estar dotada de movimiento real o virtual, ya que se inspira en los juguetes articulados del maestro Torres-García. Anteponiendo con este arte, la forma a la descripción. La percepción racional a la fantasía. Es bueno resaltar también de que el uso de la luz y de la ciencia también formó parte del universo MADI; ejemplo de ello es la ejemplar obra de Gyula Kosice de 1944. En la que el notable artista realiza un relieve de hermosa composición, hecho con tubos de luces de neón. Este hecho es relevante e histórico, pues de adelanta en casi 2 décadas a los artistas cinéticos y minimalistas americanos que también hicieron uso de aquella luminosidad para sus respectivas creaciones. En tanto que también influenciaron en el uso del formato irregular pictórico a maestros como Stella, Polk-Smith y Nolan entre otros.

El triunfo universal de MADI se dio en 1948 en parís, en «realistes nouvelles». Despertó tal atención la originalidad de los artistas MADI, que por primera vez un bloque de artistas del hemisferio sur se metían por la puerta grande a la historia del arte.
Esto motiva a Arden Quin a quedarse en parís y crear allí un grupo MADI, el cual se mantiene ajeno al arrollador arte cinético por venir. En cambio los artistas restantes  -los del cono sur- , caracterizados por la imponente personalidad de Gyula Kosice, derivarían hacia el cinetismo de los 60’s. Es justamente este visionario quien inventa el «hidrocinetismo», estilo en el que el líquido es el que da movimiento a la obra. Hecho que le distancia años más tarde de MADI.
                 

Paralelo a la difusión del arte MADI, se editó la revista «MADI arte universal», para divulgar su prédica y sostener así su plástica.
colaboraron con esta revista maestros del arte universal como Naum Gabo, Antoine Pevsner, Geroge Vantongerloo, Wordemberge-Gildewart, Mies Van de Rohe, Alberto Magnelli, Auguete Herbin, Sonia Delaunay, César Domela, Piero Dorazio, Lucio Fontana, Max Bill, Andre Bloc, Ilya Bolotowsky y Walter Bodmer.
Sin embargo el grupo MADI no murió en los 60’s, pues en las décadas siguientes todo un ejército de jóvenes artistas
de todo el mundo, crean y especulan con las nuevas tecnologías manteniendo así la vigencia y atemporalidad profética de sus fundadores.

Tan es así que el legado cuenta con casi 65 años y sigue siendo tan fresco e imprescindible como que indudablemente es la primera vanguardia del arte latinoamericano .

Si el loco persiste en su locura, se convertirá en sabio . (William Blake)
Yo también creo en la sabiduría.. MADI
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